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Días han pasado desde que destrozaron todo mi hogar, todo se ha mantenido bajo perfil siendo necesario para evitar un escándalo, ahora faltan días para el gran desfile y todos estamos llenos de estrés, fatiga y con ansias.

—Ya esta.—le dije a la modelo.

El taller es un caos, todos estamos mirando el reloj cada segundo, tanto las costureras como yo, dándole los toques finales a cada pieza, me gusta inspeccionar cada una de las prendas en su realización, confío en los demás pero es mi trabajo y adoro sentirme parte del equipo. Aunque dicen que soy exigente, es solo el hecho de que me gustan las cosas a la perfección, bien hechas para sentirme orgullosa de todo el trabajo.

—El conjunto tres está casi listo.—avisa Taly.

Asiento con la cabeza parandome de la silla donde estoy sentada, el siguiente conjunto es uno verde y la modelo ya lo tiene puesto para ajustarlo a su medida, tomo un alfiler para ajustar la tira del costado izquierdo, inspecciono las costuras y la tela, siento que le falta un poco más de volumen, así que agrego una capa más de color azul haciendo juego con el collar que lleva en el cuello?

—¿Les gusta?—le pregunto a Drake y Taly que están a mi lado.

—Fascinante.—comentan.

—Bien, con esto terminamos por hoy.—le sonrió a todos quienes asienten y me dirijo a la modelo—. Gracias, puede quitarte el conjunto y dejarlo colgado ahí dentro.—señalo el vestidor, la chica pelirroja asiente y se va.

Me quito el alfiletero que llevo en la muñeca y lo pongo encima de una gran mesa donde hay muchas telas, tijeras, cintas y demás.

—¿Cómo va todo? Estos días han sido un caos.—dice Drake.

Tomo aire antes de responder, es un gran cansancio que cargo sobre mis hombros, ahora solo quiero ir a casa para ver a mis dos hombres e ir a la cama.

—Mucho estrés, después de esto tomaré unas vacaciones.

—Creo que todos lo haremos, ¿y sobre el otro asunto?—pregunta un poco incómodo.

Sé de lo que está hablando, la policía ha seguido investigando pero no hay nada que pueda servir, mientras tanto Axel siempre está alerta y preocupado por lo que pueda ocurrir o no.

—Sin nada, no hay algo que pueda demostrar quién es el culpable.—hago una mueca.

—¿Y cómo van las cosas con Lucas?—le doy una sonrisa.

—Aún no decimos nada sobre nuestro compromiso, Alisa se va a casar también y no queremos opacar su matrimonio.

—¿De verdad?—asiento.—Me alegro mucho por tu madre y por ti. Ya veras que vendrán buenos tiempos.

Le agradezco sus palabras y regreso a mi oficina, bueno la que aún comparto con Axel pero él casi no pasa aquí, últimamente se ha alejado y solo aparece cuando es requerido.

*

Me siento en la silla detrás del escritorio recargando mi cabeza en el espaldar de esta, estoy tan cansada que quiero mis ojos unos segundos, y antes de poder dormirme siento unas manos pasar por mis hombros, abro los ojos rápidamente viendo a Lucas mirándome sonriente.

—Hola, amor.—se inclina a besarme.

—Hola.—respondo algo extrañada, una sensación rara me provoca su beso, pero decido quedarme callada.—¿Qué haces aquí? Pensé que nos veríamos en casa.

—Sorpresa. Jack está con Alisa, aproveche para venir por ti.

—Por supuesto.—sonreí un poco.

Él me ayuda a recoger mis cosas, también a ordenar un poco la oficina.