Los Protegeré (TR y KNY) [RD]

Capitulo 13: Antes de la batalla, Los Fundadores De Los Black Dragons.

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Sábado 29 De Octubre Del 2005: 2 Días Para El Halloween Sangriento

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Narra Kim:

Era Sábado ya, esta semana después de que Takemichi se fuera, ayude a Chifuyu con la investigación de Kisaki, fui con Emma y Hina al centro comercial, donde Hina compro un collar para Takemichi, algo muy tierno, artas ganas de tener un bato o una novia que te de ese detalle, pero weno, estaba entrenando en un lugar apartado... ñe, a quien miento, estoy entrenando en el templo Musashi, es tranquilo, además, siempre entrenaba con Himejima en lugares así, así que nada nuevo.

Descubrí que mi estilo de combate es mixto, puedo pelear cuerpo a cuerpo con artes mixtas y usar una katana, o un palo, en estos momentos me encontraba usando una espada de kendo para entrenar, era como usar una real, pero más ligera.

Era bastante tarde a decir verdad, más exactamente eran las 5 de la tarde, el sol comenzaba a ocultarse, pero seguía entrenando sin parar, queria estar lista, queria ser lo suficientemente fuerte, no me bastaba con el guion, no podía confiarme de ese "poder", si queremos llamarlo así.

Escuche pasos detrás de mí, en un rápido movimiento hice como si fuera a cortar la cabeza de un demonio, corte limpio y preciso a pesar de no ver de quien se trataba.

—¡N-No me mates!, soy yo— hablo Takemichi, el cual tenía mi espada a centímetros de él.

—¿Takemichi?— dije bajando la espada al ver al nombrado, había vuelto.

—Tenías razón, eres buena con esa cosa— dijo riéndose.

Sonreí y asentí —He practicado, mi cuerpo aquí no está acostumbrado a usar una Katana, menos una espada, necesito hacer que se acostumbre al uso de esta—

—Pesa— dijo sosteniendo dicha espada y haciendo movimientos torpes.

—No tanto, en la era taisho estas eran más pesadas, era el mago y la hoja, era liviana sí, pero pesada por el metal— me coloque detrás de él ayudándolo a sujetar la espada —Mantén tu postura firme, el mango así, un pie adelante y el otro atrás—

—¿Así?— Takemichi se acomodó como le había dicho.

—Si, debes sujetarla bien, no vaciles, un corte limpio y preciso definía si vivías o morías— le dije a la vez que entre los dos hacíamos dicho movimiento —Ahora hazlo tu—

—Si— dijo Takemichi determinado, inhalo y exhalo, finalmente retomo la postura anterior e hizo el corte, no fue perfecto, pero no lo hizo mal.

—Te hace falta práctica, pero no lo hiciste mal— dije tomando la espada y guardando mis cosas.

—¡¿De verdad?!— pregunto emocionado, yo me reí y asentí.

—¿Como me encontraste?— pregunte mientras bajábamos del templo.

—Fui a tu casa y Sanemi me dijo que estabas entrenando, Aiti me dijo dónde estabas, así que decidí venir a recogerte—

—Valla, tengo un amigo que es todo un caballero— dije riendo.