40

120 10 0
                                    

Si, bueno, la idea era que Yeonjun lo distrajera y yo pudiera estar a solas con Gaeul

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Si, bueno, la idea era que Yeonjun lo distrajera y yo pudiera estar a solas con Gaeul...
¿Entonces porque estábamos los cuatro en la misma mesa, mientras Hongjoong era el centro de atención?

Las cosas parecían haber salido al revés, pues Hongjoong era el que estaba distrayendo a Yeonjun, haciéndolo reír, no solo a él, sino también a mi cita.

– Les juro, ese día acabé muy ebrio, entonces este policía, que diría no tendría más de veintiuno o por ahí, incluso creo que era novato; y le muestro-

– ¿Está historia tiene algún final? – Sonreí con falsedad. – Porque de verdad me está dando sueño oírte.

– ¿Te estás aburriendo? – Gaeul me miró con ojitos tristes.

¡No, bebita!

– Para nada, linda. Sigamos escuchando, esta entretenido.

Ella sonrió y asintió. – Si. Mi hermano siempre cuenta buenas anécdotas.

– Es verdad, Hongjoong, continua – dijo mi amiguito.

Yeonjun estas ganando todos los números en la lotería de patadas al trasero.

Hongjoong continuó. – Y me dice, "te veo tan ebrio que si le tomo prueba de alcoholemia a tu foto de carnet, seguro da positivo", fue tan estúpido, pero aún así me reí.
Ese policía contaba los chistes más tontos, lo confirme cuando me llevaron y tuve que pasar la noche en la estación.

– Woa, ¿y nunca lo volviste a ver? – y Yeonjun seguía dándole letra.

Vamos amigo, ¡cartón lleno!

– Lastimosamente no, y realmente me gustaba.
Tenía unos hermosos labios gruesos y un cabello tan negro como mis ojos.

– Tu alma, mejor dicho – murmuré. Solo Gaeul me oyó y soltó una risita baja.

– No me dijste como la estas pasando tú – preguntó.

– Fantástico, seguro.

– Estas siendo sarcástico – puchereó. – Hongjoong es sarcástico, se parecen más de lo que creen – agregó con diversión.

Me acerqué un poco a ella. – Lo único que podríamos tener en común, es lo mucho que te queremos.

– Oh...

– ¿Qué tal si salimos a dar un paseo?

– Hongjoong se dará cuenta...

Tomé su mano. – Entonces seamos traviesos y corramos a la cuenta de tres, ¿si?

– Nos perseguirá.

– Entonces que sea un juego.

Sonrió. – ¿Cómo el juego de policías y ladrones?

Fruncí mis labios, asintiendo. – Si, suena divertido – se levantó, haciendo un bollo con la servilleta. – Dos equipos – dijo de repente, haciendo que la miremos. – ¡Atrápame si puedes! – Arrojó directo la servilleta a la cara de Hongjoong y sujetó mi mano, tirando de mi cuando comenzó a reír.

NO TAN HETEROSEXUAL | YEONGYUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora