Dulzura Disfrazada [2]

Capítulo 24

ADVERTENCIA: abuso y violencia sexual.

Dejé un resumen abajo para quienes les incomode leer esto, así podrán entender lo que pasó.

—HACE 5 AÑOS—

Elle Montaner

De pie en la entrada del salón, viendo a mi padre puedo notar lo cansado que está, trabajó muy duro por semanas, no me atrevo a decirle que vayamos a jugar al patio de la casa. Cuando llegó hace dos semanas me abrazó y contó historias que me hicieron reír, pero mientras pasa el tiempo se ve más decaído, hoy dijo que quería sentarse junto a la chimenea, mamá que siempre suele acompañarlo no lo hizo, me pregunto si algo anda mal...

—Ven, Elle —oí susurrar a mi hermano.

Volteo solo para alcanzar a ver como desaparece tras las escaleras, de inmediato voy tras de él.

—¿Qué pasa? —Pregunté.

Él mira a los alrededores fijándose que nadie oiga lo que dirá.

—Ella lo sabe —murmuró.

—¿Quién sabe qué?

—Hope... sabe que la muerte de Miguel tiene que ver con nosotros, no deja de preguntarme cosas y seguirme en la escuela.

Miguel... han pasado varias semanas desde que comenzó su búsqueda, aún no lo encuentran y ese hecho acrecienta el dolor en mi pecho, he pensado que lidiar con la culpa me volverá loca.

—¿En serio?

—Sí, me está comenzado a desesperar, no la soporto —se quejó mi hermano.

Tuve miedo de que él pensara que debía hacerle daño, ya no quería que lastimara a más gente, yo solo quería que se redimiera de las cosas malas que hizo, que sintiera culpa y actuara como alguien normal.

—No estarás pensando en matarla... júrame que no lo harás —supliqué angustiada.

—Te lo juro.

***

Las semanas siguieron pasando hasta que se convirtieron en meses. Asher estaba más alejado de mí, ni siquiera me buscaba para almorzar juntos, ya no quería pasar tiempo conmigo o eso pensaba yo, cada día junto a mis amigas lo único que hacía era preguntarme qué sucedía con él, un día salí antes de la escuela, mis amigas me invitaron a jugar voleibol pero las rechacé, pensé que era la instancia perfecta para investigar un poco en la habitación de mi hermano, quizás había alguna pista de algo que estaba planeando. Dios, tenía mucho miedo de que estuviera planeando atentar contra la vida Hope, había escuchado que cuando una persona cometía un asesinato le perdía el respeto a la vida.

Mamá trabajaba, papá también, en la mansión solo había gente del servicio, así que me escabullí hasta la habitación de Asher, al ingresar las paredes caoba y las figuras gigantes de arte adornaban su habitación, su escritorio, la pared llena de insectos disecados, sus libros, todo estaba sumamente ordenado. Él podría darse cuenta de inmediato de que estuve ahí así que intenté ser lo más cuidadosa posible al revisar sus cajones, bajo su cama, entre sus libros, incluso en su baño, no había nada sospechoso, nada que me dijera que era lo que le sucedía conmigo. Yo no estaba acostumbrada a que él no me diera su atención, dependía emocionalmente de él aunque no lo sabía, siempre estuvimos juntos, desde que nacimos nadie nos separó y estás semanas con él distanciado se sentían horribles, como si yo no fuera yo.

De pronto escuché unos pasos acercarse a la habitación y entré en pánico, si él descubría que había intentado husmear entre sus cosas se enojaría conmigo, no me gustaba mi hermano enojado, era algo que me daba mucho miedo, así que asustada rápidamente me escondí en su armario. Cerré la puerta justo antes de que mi hermano y una chica entrarán por la puerta.