Cuento para Dormir

584 5 0
                                    


Enfadada por el rumbo de los acontecimientos, me fui casi a la carrera a mi cuarto
me desvestí templando de frió, ya que las criadas no habían encendido la chimenea y el cuarto estaba helado.

Mis pezones se pusieron tiesos en protesta por la falta de calor, así que sin pensarlo mucho, moje una de las puntas del lienzo en el agua fría de la jofaina y me restregué desde la cintura hasta el borde del cuello. Luego me seque, me lave la cara y corrí descalza a meterme debajo de la piel de oso que adornaba mi cama y me servía de manta.

Golpee varias veces la almohada intentando desquitarme la frustración y la puse a lo largo de mi cuerpo llegando a mi estomago. La verdad es que era un postura cómoda y me quede transpuesta, seguramente debido al cansancio.

Sentí un ruido que se me antojo muy lejano, no parecía provenir de ningún lugar de mi cuarto, aun así mí mente de luchadora quiso registrarlo, comparándolo con el de la puerta o el del armario, conde estaba el pasadizo, que usaba mi amante secreto.

No se parecía en absoluto a ninguno de ellos así que seguí durmiendo plácidamente hasta que sentí como mi piel de oso se escurría despacio hacia abajo, despacio, muy despacio...

El aire frió termino de convencerme de que no era un sueño ni una sensacion, alguien estaba en mi cuarto.

Sin duda había entrado por la ventana y de hay el ruido que no logre identificar.

Busque mi daga, pero con el frió del cuarto había olvidado llevarla a la cama.

Me quedaría quieta fingiendo dormir hasta estar segura de tener una posibilidad de vencer a mi agresor sin morir en el intento, aunque lo que ocurrió me dejo paralizada...

Pude sentir como se inclinaba sobre mi para oler mi hendidura desde cerca y al hacerlo dejo salir su aliento sobre ella que se estremeció con el aire caliente, la traidora comenzó a mojarse...


Tenia mi cabello sobre la cara así que aunque abrí ligeramente los ojos no puede ver de quien se trataba solo un reflejo de un cuerpo de hombre de un gran tamaño, tenia que estar muy segura de lo que hacia, con semejante cuerpo no tendría oportunidad si no le pillaba por sorpresa.

Mi mente se quedo en blanco cuando sentí su mano pasar despacio desde mi clítoris hasta la apertura del ano varias veces...

Paro de hacerlo y entonces volví a respirar, lo suficiente como para volver a parar cuando son uno de sus dedos húmedos masturbo mi botón...

Rápidamente la humedad comenzó a manar, dentro de poco se daría cuenta de que yo reaccionaba...

Pero si estaba dormida no podía reaccionar ¿O si?.

Me obligue a estar relajada como si aun siguiera estando dormida

OOOOOOH¡ Un dedo invasor jugueteaba con mi coñito haciéndole dilatarse en respuesta a sus insinuaciones, hasta que termino por tragárselo sin ningún miramiento...

Me agarre fuerte a la almohada no quería gemir, pero me estaba sometiendo a un precalentamiento completo que debería parar o...o...

Su dedo abandono mi clítoris, sentí un ruido, me estaba escupiendo en el ano, y acto seguido su dedo me perforo. No le consto trabajo lógicamente yo estaba excitada y mi amante le gustaba aquel orificio de vez en cuando.

Sus dedos se alternaban en el mete saca a un ritmo frenético que lo único que me garantizaban era que me iba a correr con esa masturbación en todo regla y mas si de vez en cuando sus nudillos volvía a rozarme el clítoris, comencé a correrme aunque intente negarlo, mi mano iba agarrándose al borde del colchón y al mismo momento de correrme cogí el asa de la bacinilla metálica.....

Mi grito de placer quedo mezclado con el sonido del metal contra su cabeza.




Sabia que tenia el cuerpo un poco rígido, pero  tardo apenas dos minutos,  en darse cuenta de que tenia la polla como un bastón de mando.

Y no solo eso. Si no completamente mojado.

Despacio movió una mano y encontró una cabeza, esperaba que al menos fuera femenina....

Intento levantar la cabeza pero un gran dolor le recordó los hechos.

Así que de momento se limito a sentir y se sentía en la gloria, aquella boca le estaba haciendo un trabajo grandioso, lamiéndole desde el nacimiento hasta la cúspide sin olvidarse del frenillo, a lo largo y a lo ancho, incluso de vez en cuando usaba los dientes haciendo una presión que rayaba en dolor, así que mejor hacerse el inconsciente aun...

La boca subió dándole besos hasta llegar al ombligo, donde la lengua cálida le hizo una inspección a su poco prominente hueco y siguió para arriba dando besos secos de terciopelo suave hasta llegar a las tetillas, que mordió con cuidado, lamió y soplo hasta ponérselas tiesas, subió y subió hasta el cuello, que fue tratado de la misma forma hasta obtener un escalofrío que le recorrió hasta la punta de los pies.

Sintió la sonrisa de los labios femeninos contra la piel de su cuello

Las tetas femeninas colgaban sobre su cuerpo mientras y no dejaban de rozarle el pecho...

Se sintió llevado hasta el interior del cuerpo femenino que le sentaba como un guante, mientras que ella se movía arriba y abajo, buscando una placer que le estaba dando al mismo tiempo..

Arriba , abajo y medio giro circular, cada vez mas rápido...cada vez mas deprisa...

No sabia por que diantres estaba tan excitado, pero claro podía hacer horas que esa arpía estaba abusando así de el.

Intento incorporarse para cambiar aquella postura matadora y ese ritmo infernal, pero no lo consiguió, por que sintió una hoja de acero en su cuello.

-Susssssssssssss, quietito...

Abrió los ojos, pues era tontería seguir fingiendo si ella sabia que no estaba inconsciente, solo para ver el rostro de puro placer femenino, que se mordía los labios al tiempo que se tocaba el pecho y aumentaba otro poco mas el ritmo...

-Bruja, me las pagaras.....

Despacio milímetro por milímetro, movió su mano para alcanzar su clítoris al tiempo que comenzaba a correrse dentro de ella, sonrió justo cuando terminaba de proyectarse dentro de ella pues la oía maldecir ahogada entre su orgasmo....

Cuentos y Relatos EroticosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora