Caminos Infinitos

Capítulo 87

(POV Kurumi)

Kiba nos habló de su pasado, y sobre el proyecto que la Iglesia Católica planeó en secreto denominado “Proyecto Espada Sagrada”, y de como se realizaron pruebas en el y en un grupo de niños y niñas que tenían talento en el uso de espadas y poseedores de Sacred Gear.

Día tras día, se les sometía a través de experimentos inhumanos, siendo experimentados y teniendo su libertad arrebatada. Ellos no fueron tratados como seres humanos y se ignoraron sus vidas, pero tenían un sueño, para sobrevivir tenían su esperanza.

Se vieron obligados a creer que fueron amados por Dios, y ellos estaban a la espera de que ese día estaba por venir, ellos creían que iban a convertirse en seres especiales. Creían que podrían convertirse en personas que podían usar espadas sagradas, pero el resultado fue el descarte…Kiba y sus compañeros no podían usar las espadas sagradas.

Kiba: …Todo el mundo murió. Fueron asesinados, asesinados por los que sirven a Dios. Por el hecho de que no podíamos utilizar las espadas sagradas, fuimos sometidos a gas venenoso…Pusieron ese gas venenoso sobre nosotros mientras decían “amén”. Vomitando sangre y sufriendo en el suelo…Aun estábamos buscando la ayuda de Dios-. Apretando sus puños con furia y tristeza, continuó con una voz serena y decidida.

Kiba: …Quiero vengar el lamento de mis compañeros. No, yo no quiero hacer que sus muertes sean en vano…Tengo que seguir viviendo en su lugar, y tengo que demostrar que soy más fuerte que la Excalibur-.

No podía dejar de llorar al terminar de escuchar la historia de Kiba, mientras le preguntaba a Ddraig.

Kurumi: (…¿Por qué las personas son tan malvadas?)-.

Ddraig estuvo en silencio por un momento antes de responder con una tranquila y serena voz. 

Ddraig: […El mundo está llenó de humanos o seres así, Kurumi…Para bien o para mal, creciste rodeada de personas que te aman mucho y protegida de está maldad, por eso te es difícil de aceptar, pero…lo mejor sería que te acostumbres, por que veras muchas situaciones así]-.

Kurumi: (…Yo…entiendo…)-. Sabiendo que tenía que ser más fuerte, no sólo físicamente, sino también mentalmente, me seque las lágrimas.

Kurumi: (Gracias, Ddraig)-.  

Ddraig: [No te preocupes]-.

Así cómo Onii-Chan y los demás me protegieron, era mi turno de hacerlo, con este deseó ardieron en mi corazón, grite.

Kurumi: ¡Cuenta con la ayuda de Kurumi, Kiba!. ¡Vamos a golpear a esas personas malvadas!-.

Raynare: (*Suspiro*…Su hermanita es bastante amable y sentimental, Maestro, pero…no me desagrada del todo)-. Simpatizaba un poco con el pasado de Kiba pero eso era todo, además, aunque ella misma tenía un pasado desgarrador, para ella ya era pasado, y sólo le importaba el presente y el futuro que tendrá con su Maestro. 

Raynare: Bueno, la Esposa Principal ya habló~-. Dijo con una sonrisa tranquila a las declaración de Kurumi.

Koneko: Cómo dije antes…No dejaré que lo hagas sólo-.

Saji: ¡Kiba!...*Llorar*…¡Debió haber sido horrible!...*Llorar*…¡Debió haber sido doloroso! ¡Maldita sea! ¡No hay ningún Dios ni esperanza en este mundo, en este momento siento respeto por ti! ¡Sí, es una historia horrible, Ya entiendo por qué tienes un resentimiento contra las personas de la iglesia y Excalibur!-.

Aunque no lo parezca, Saji es una buena persona, pero está a mil años luz de acercarse a Onii-Chan.

Kiba: ¡Está bien! ¡Es un buen momento, y yo quiero que ustedes oigan mi historia! ¡Deberían saberlo ya estamos trabajando juntos!-. Dijo con una sonrisa feliz y estando un poco avergonzado por sus palabras de apoyo.