Frida [Ivar The Boneless/Alex Høgh Andersen]

14

Después de días se logra llegar a un concilio sobre el destino de Ecbert. Ivar no está feliz con ello, por eso no desaprovecha la oportunidad de desahogarse con Frida, ella lo escucha.

Hasta ahora ella no ha querido hablar sobre lo que sabe de Floki, siente que no le corresponde, y no quiere que Ivar se sienta aún peor por esa noticia, que no es tan grata para ellos. Así que esperará al momento indicado, o hasta que él lo descubra.

Frida se ha recuperado, y ha tomado el lugar de Helga curando a los enfermos. Es cuando ha terminado su jornada, y se dirige a comer, que se topa con Ivar, algo molesto.

—Ya se está haciendo costumbre verte enfadado —Ivar suelta una risita, mientras continúa arrastrándose para llegar a dónde quiere, al parecer hay una celebración que se llevará a cabo. Todos están reunidos.

—Ecbert ha muerto —anuncia Ivar, Frida se emociona.

—Creí que era lo que queríamos todos. ¿Por qué no estás feliz?

—Porque él eligió su muerte. Murió de la forma más piadosa y cómoda que puedas imaginar —Frida se deprime un poco por eso, también.

—Al final es lo que debía pasar, cariño. Ya está, ha terminado todo esto. ¿Sigue en pie lo de quedarte aquí? —Ivar sonríe.

—Te quedarás conmigo. ¿Cierto? —ella sonríe, segura.

—A dónde sea que vayas, ahí estaré —ambos se sonríen.

—Vamos a comer, hay un gran festín por nuestra victoria.

Frida sigue a Ivar, pero ella busca lugar debajo de esa mesa más alta, dónde los hijos de Ragnar van a comer.

Frida conversa con otros guerreros, hasta que aparece el rey Harald, quitando a esos hombres de un lado de la chica. Apenas el hombre se sienta a su lado, él ya le ha servido vino. La chica toma su copa con intención de beber, pero enseguida el rey pone su mano sobre la de ella, deteniéndola.

—Deberías preguntarle a Ivar si puedes beber —Frida está desconcertada por eso, y al mismo tiempo furiosa. No pierde el tiempo en observarlo de una forma grosera y retadora. Ivar ve eso desde lejos, se siente orgulloso.

—Incluso cuando Ivar sea mi esposo, él no tiene por qué aprobarlo, eso lo decido yo.

La chica aparta la mano del rey y enseguida bebé el vino, de una forma rápida y sin despegar sus ojos de ese hombre. El rey suelta una risita y se acerca para susurrarle.

—Esta es una de las tantas razones por las que estoy enamorado de ti.

Apenas termina de decir eso, la comida llega y todos comienza a comer. Frida no ha parado de beber, igual que todos a su alrededor, sólo que su capacidad para soportar tanto no es la misma que esos hombres mayores. Sólo cuando han terminado de comer, Frida deja de embriagarse, para darse cuenta de que comienza a marearse. Y para arruinar todo, el rey Harald vuelve a dirigirle la palabra.

—Ivar tiene virilidad, después de todo. ¿Acaso ese pene que cortaste fue una ofrenda a Freyja? Al parecer te lo recompensó de alguna forma.

A Frida se le va la borrachera por un momento, se queda seria y pálida. ¿Y si esa fue la verdadera razón por la que ella cortó ese pene? ¿Y si Floki tenía razón y la diosa quería otorgarle esa oportunidad a Ivar?

—Yo no lo sé —el rey Harald ríe, le parece adorable la imagen de Frida ebria.

—El cuento que Floki creo para salvarte es verdad, después de todo —el rey toma el vaso de Frida con alcohol y lo acerca a su boca para que beba más, ella lo hace.

—Yo jamás he visto un pene, y no me inmuté al ver ese. Sabe que todo esto fue plan de Floki, pero ahora comienzo a creer que tiene razón, y eso fue lo que pasó, Freyja entró en mí.

Harald le sirve más bebida a la chica, quién lo traga antes de que Harald lo note. De pronto, Björn comienza a hablar para todos. Frida ya no escucha, Ivar está consciente de eso, y de lo mucho que ha bebido, sabe que alguien tendrá que ayudarlo a llevarla hasta su habitación. A pesar de eso no se distrae. Después de que Björn anuncia que regresará al Mediterráneo, él externa sus sentimientos de que el Gran Ejército siga ganando territorio. Frida sólo sabe que los hijos de Ragnar han comenzado una discusión, nada extraño, y que el hermano del Rey Harald irá con Björn.

Su total atención va hacia ellos cuando escucha los gritos de Sigurd y Ivar. Su prometido está furioso, y Sigurd parece disfrutarlo, ella ve algo en el menor de los Lothbrok. Entonces comienzan a insultarse por cosas relacionadas al sexo, y a su madre. El menor parece explotar, y es cuando la chica lo presiente.

—¡Ivar, no! —Frida intenta llegar hasta Ivar, pero Harald la detiene, sosteniendo su mano.

—Si vuelves a hacer algo frente a todos te matarán, y a Ivar contigo.

Hasta que de pronto, de un extremo de la mesa al otro, Ivar lanza un hacha, dándole a su hermano. Todos ahí están impactados, entonces Sigurd intenta ir tras Ivar, quién está sorprendido por lo que ha hecho. Es entonces que Frida se escapa de Harald, y busca llegar hasta donde están ellos. Pero entonces Sigurd se desploma, Frida hace lo mismo, pierde la conciencia y ambos caen frente a todos. Rápido van a revisar a Sigurd y a Frida. Ivar está en shock. No sabe a dónde ir, no sabe lo que ha hecho.