50

367 24 2
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Cuando se ha hecho de noche, Frida entra a esa habitación, encontrando a Ivar sentado, intentando quitar esas cosas de sus pies. Apenas él la escucha entrar, la observa y le lanza una sonrisa. Frida corre a sus brazos, sube a él, sentándose en su regazo, sujetándose por sus hombros y besándolo de una forma pasional e intensa, cuando se separa de él, Ivar ríe.

—¿Y eso? —él puede ver en esos ojos un brillo especial, que no logra comprender hasta que ella habla.

—Astrid, ella es quien nos ayudará a deshacernos de Harald —Ivar está confundido.

—Esa mujer me odia porque intenté asesinar a su Lagertha, dudo que ese sentimiento se haya ido. Y ahora es reina de todo esto. ¿Qué te hace pensar que nos ayudará? —ahora Frida suelta una risita.

—Ivar Lothbrok, aún hay mucho que no logras comprender sobre la vida, todo lo que las mujeres estamos dispuestas a hacer por amor —él se limita a esperar lo que ella tiene por decirle, y a acariciar ese cuerpo por arriba de la tela de su vestido.

—Estoy dispuesto a intentar comprenderlo. Dime: ¿Qué debemos hacer? Adoro cuando te pones siniestra, cruel, cuando en tus ojos y tu risa hay un rayo de maldad —Frida vuelve a reír.

—Astrid no está aquí porque así lo quiere. El rey Harald la secuestró. No conocemos a esa mujer, pero sabemos que es inteligente, astuta, brillante, y una guerrera. Ella no ha dejado de amar a Lagertha; ¿Cómo dejaría de hacerlo si fueron separadas? Astrid sabe que el Rey Harald tiene intenciones de atacar Kattegat. Sin que Lagertha se lo haya pedido, ella aprovechará la oportunidad de ser una espía, una infiltrada que ayudará en la estrategia del mayor enemigo de Harald.

—¿Qué? —no hay nada de emoción en Ivar, está asustado—. ¿Por qué te alegra? Debemos decirle al Rey, esa mujer es una traicionera.

—Eso es parte del plan. No se lo diremos, no debe saberlo. Conozco lo tonto que es el Rey Harald, se enamora perdidamente y de las personas equivocadas, esa será nuestra carta. Apenas Astrid tenga la oportunidad intentará huir con Lagertha, y cuando abandone a Harald, él se sentirá tan humillado, traicionado y tonto que estará vulnerable.

Frida [Ivar The Boneless/Alex Høgh Andersen]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora