Pantera (Omegaverso/GrimmIchi)

Sensual obsesión

¡Regresa Bleach y por ello regresa Pantera! Gracias a los que nunca perdieron la esperanza de ver el anime de vuelta y también a los que me esperaron por años con esta historia. Les dejo un capítulo largo de celebración. <3

///Grimmjow///

Profecías del remoto pasado y quizás de un cercano futuro me susurran cada noche entre sueños desérticos, donde la arena cae como oro en polvo a través de las dunas mientras las estrellas transitan en el firmamento igual que una lluvia interminable de luz. Sin embargo, ni todas las estrellas, ni todo el oro en el universo pueden siquiera asimilar un fragmento de la belleza de Ichigo.

El único dios al que estoy dispuesto a venerar hasta la muerte debido a su grandeza y esplendor. El sol de mi vida que no sólo le da calor y pasión a mi cuerpo, sino que ilumina todo a su alrededor con sólo su hermosa presencia. Y como tal, así como las dunas de oro y la lluvia de estrellas, a menudo Ichigo también se encuentra en mis sueños.

Danzando a mi alrededor con su ropa insinuante como la más bella ilusión mientras sonríe, su largo cabello vuela y sus caderas con tiras de diamantes tintinean. Ichigo que me abraza y me dice que debo ser valiente y fuerte, el más fuerte porque el mal está cerca y sólo permaneciendo unidos podemos detenerlo.

Todo para que al despertar, así como en mis sueños, me encuentre entre sus brazos con él sonriéndome como el ángel divino que es haciéndome saber que no hay nada que no haría con tal de verlo feliz y con ello su preciosa sonrisa que opaca a la misma luna. Será que su belleza está prohibida para todos menos para mí, un monstruo cruel y despiadado, que lo destroza cada noche entre sus brazos y le da tiernos besos por la mañana.

Kurosaki Ichigo, mi más grande amor y perdición.

Yo que no conozco límites, sé que él mío empieza y termina con él y aún así no hago más que anhelar verme cobijado bajo su gracia. Y por eso finalmente decidí brindarle todo mi apoyo para que se vuelva el omega más fuerte que ha tocado este mundo. Al principio estaba algo renuente de verlo herido, pero a lo largo de estos meses Ichigo me ha demostrado que es mi esposo por una razón abatiendo en combate a todo cuanto ha pretendido plantarle cara.

Siempre pensé que el poderío de un alfa era insuperable, pero al ver de lo que Ichigo es capaz he entendido que su poder únicamente puede ser comparado con su belleza. No tiene límites. No sólo es bueno en combate cuerpo a cuerpo por su flexibilidad y fuerza bruta, sino que aprendió bastante rápido cómo utilizar a Zangetsu.

Sin embargo, algunas complicaciones debió de tener y es que tarde me contó, que de alguna forma la empuñadura no se siente correcta entre sus manos. Como si no encajara de esa manera, por lo que a menudo termina perdiéndola en pleno combate y eso para cualquier guerrero no puede implicar más que la muerte.

Así que con el objetivo de mejorar sus técnicas de combate, además de investigar sobre la espada de Zangetsu, hemos iniciado una travesía más lejos de nuestro hogar. Llevamos cerca de dos semanas atravesando el árido desierto en nuestra gran caravana, únicamente deteniéndonos durante las noches para que mi omega e hijos descansen, se alimenten y duerman apropiadamente.

-Esto me trae recuerdos, alfa...-Ichigo llama mi atención no sólo con sus palabras, sino con el delicado tacto de sus preciosos dedos sobre los míos. De inmediato tomo su mano, besando sus nudillos y sacándole una bella sonrisa aún por debajo del pequeño velo rojizo que le cubre la mitad del rostro y que hace juego con el que trae en la cabeza y le cae como una cascada por la espalda.

-Hace mucho que no subíamos a un elefante, la última vez fue cuando entramos en uno a la ciudadela del país del agua. Es divertido, aunque me pregunto si estará cansado. -pregunta estirando su mano fuera de los asientos para acariciar el gran e imponente animal que nos transporta.