Mis lectores, las estrellas de mi cielo, gracias por siempre esperarme con devoción. Mi corazón es suyo <3
///Ichigo///
Un eco discordante resuena en mi cabeza cada vez repito el nombre de Grimmjow. Se escucha como el aleteo de las mariposas, la brisa del mar y los rayos del sol que se asoman entre las hojas de los árboles que danzan. Mi intenso amor que no entiende de razones ni motivos cuando de él se trata. Tal y como esas noches frías en las que hasta ver al cielo es motivo para recordarlo.
¿Cómo puede un simple hombre atravesar estas noches?
La respuesta es en compañía de dios y la luna. En mi caso, mi dios tiene una boca y temperamentos tan intrépidos como su mirar de pasión azul estrellado. Ese hombre que es mi religión y corazón, aquel al que le dedico cada plegaria y suspiro, ese ser digno de mi devoción y eterno amor. Mi amado alfa, mi marido, el padre de mis hijos, mi rey.
El mismo con el que después de pasar algunas semanas maravillosas en el oasis de los dioses, por fin ha decidido que es tiempo de volver a la ciudadela, no sin antes llevarme a conocer uno de mis más grandes sueños. El océano.
Por años he soñado con verlo con mis propios ojos, sentirlo y adentrarme en él, pero al vivir a mitad del desierto desde que tengo memoria, no ha hecho sino disolver ese lejano anhelo. Sin embargo, cuando le conté a Grimmjow, rápidamente dio instrucciones de desviar las caravanas para irnos hacia uno de los extremos de los territorios del país del agua, justo donde termina el desierto e inicia la jungla espesa de las tierras salvajes.
—Nos quedaremos en Praadma, es una locación secreta en las profundidades de la jungla y por la mañana iremos al mar, ya no queda tan lejos de ahí. —me dice mi marido ahora que estamos detenidos a inicios de la frondosa vegetación.
Me asomo curioso por la ventanita del carruaje maravillándome con el lugar. El paisaje es exuberante, tan verde y lleno de vida. Gotas como diminutas perlas se deslizan inocentes desde las hojas mientras las enredaderas, lianas y troncos masivos llenos de musgo se abren paso entre la abundante maleza. Lo mejor es el delicioso aroma que abunda en el ambiente, tierra mojada y fértil. Sonrío como un niño pequeño hasta que siento varias gotitas de agua comenzar a caerme en el rostro desde el cielo.
—Grimmjow...—pronuncio su nombre a la vez que también saco mis manos mirándolas mojarse. —Alfa...—la voz me tiembla.
—¿Qué pasa? ¿Te heriste? —mi marido me toma del brazo y me jala al interior, tomando mis manos y revisándome a la vez que me olfatea en busca de alguna herida. —Mi vida, ¿Qué te ha pasado? —pregunta preocupado mientras yo lo abrazo con fuerza.
—El cielo está llorando. —confieso lo evidente, sintiendo mis ojos mojarse y viendo los de él abrirse de la sorpresa antes de que suelte una carcajada tremenda que me hace fruncir el ceño. —¿Qué es tan gracioso? ¿Cómo puedes reírte de tal desgracia?
—Mi pequeño cachorro, el cielo no está llorando, es simple lluvia.
—¿Qué?
—Espera, esta es la primera vez que ves llover, ¿No es así? —pregunta haciéndome avergonzar, porque obviamente es lluvia y me he puesto sentimental por nada, pero no me pueden culpar, estoy embarazado y ¡Jamás había visto llover en toda mi vida!
—¡Te odio! —le golpeo el pecho, notando mis mejillas colorearse y mirándolo reírse aún más.
—Mi hermoso sueño hecho realidad, no cabe duda que aún eres un cachorrito inocente. —me pellizca la nariz y yo no dudo en darle un manotazo y gruñirle. —Uh-uh, no me retes mi vida, que muero por anudarte hasta hacerte llorar y escucharte suplicar por piedad. —me estruja el rostro con su mano y me mira desafiante haciéndome sentir un rico escalofrío recorrerme el cuerpo.
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Pantera (Omegaverso/GrimmIchi)
FanfictionGrimmjow, mejor conocido como el rey pantera, ha viajado por seis días y seis noches atravesando el desierto en búsqueda de su futuro esposo. Sin embargo no está muy feliz con la idea de un matrimonio arreglado, ya que él sabe que cada alfa tiene un...