Mc es una chica común y corriente como cualquier otra, con unos grandes amigos que la quieren, todo parecía ir normal en su vida; hasta que los ataques iniciaron.
Nunca se había sentido tan insegura en su vida, hasta que llegó él.
Aquel hacker que s...
Mc estaba furiosa, no podía creer que su amigo pensará de esa forma, no buscaba que la apoyará y la alentará a seguir haciendo, eso en parte era poco.
La ponía furiosa que Richy no hiciera el esfuerzo de entenderla, nadie sabía sobre los malos tratos que había vivido en su pasado, absolutamente nadie.
Ni siquiera Jessy que era la más cercana a ella.
Al pasar un buen rato llegó Richy junto a Jessy, Mc esperaba que Richy no le hubiera contado nada a Jessy. Se saludaron y minutos después llegó el maestro y así inició la clase.
Pasaron las horas hasta que se dio la hora de salida, Mc guardaba sus cosas en completo silencio, no se encontraba de humor desde hace horas y eso Jessy lo pudo notar, con la finalidad de aminorar el ambiente tenso decidió hablar.
—Oye Mc, ¿qué te parece si vamos a comer? Hay un restaurante italiano muy bueno.
—No gracias Jessy, quiero llegar a casa y dormir un poco, no estoy de buen humor.
—Oh, entiendo, no te preocupes —mostró una sonrisa para no mostrar que se había sentido mal.
Mc sabía que Jessy estaba fingiendo su sonrisa, conocía muy bien a su mejor amiga y sabía que le había dolido que la rechazará, pero no mentía, realmente quería llegar a su casa y lanzarse a su cama y desaparecer por un momento de la realidad.
—Los veo mañana, y recuerden hacer la tarea de Zazueta, ya saben como se pone, nos vemos —se despidió de ellos con la mano y se fue del salón.
Al salir al pasillo pudo ver a Hannah y Thomas del otro lado, suponía que Hannah ya le debería de estar contando lo "mal" que la trató, decidió ignorarlos y continuar caminando, esperando el insulto de Hannah hacia su persona, pero al pasar al lado de ellos no escuchó nada, ni siquiera alguna mirada desaprobatoria por parte Thomas o alguna de amenaza por parte de Hannah.
Se extrañó pero a la vez estaba aliviada, eso sólo significaba que Hannah la dejaría en paz.
Por fin.
Las gotas de la lluvia la recibieron al salir de la universidad, se colocó su capucha y salió corriendo directo a su departamento, no quería pescar un resfriado, y más con el frío que se comenzaba a sentir.
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Al llegar lanzó literalmente su mochila sin importarle si tiraba algo en el proceso, estaba estresada, no sabía por qué. Algo le decía que se iba a arrepentir de lo que había hecho, pero algo más le decía que había sido necesario para que Hannah la dejará en paz.
Revisó su cuenta de la universidad y se dio cuenta que tenía que hacer el pago de su colegiatura, se alivió al ver que aún tenía algo de dinero, pero ya se le estaba acabando.
Confiaba en él, confiaba en que le mandaría el dinero mensual.
Guardó algo de dinero y salió de su casa para ir directamente a pagar, necesitaba algo con que distraerse que no fuera precisamente una salida con amigos, le repondría la salida a Jessy algún otro día.
