𝑴𝒊 𝒑𝒓𝒐𝒕𝒆𝒄𝒕𝒐𝒓 ||𝑫𝒖𝒔𝒌𝒘𝒐𝒐𝒅||

𝑭𝒖𝒏𝒇

         Desde hace rato que aquella incógnita rondaba en su cabeza, ¿y si realmente Jake era aquel chico, la podría defender en la universidad, la podría proteger?

Si era así, se sentía aliviada, solamente rogaba que Jake si fuera aquel chico. Porque de no ser así, estaría mas que confundida. Aunque si se ponía a pensarlo de mejor manera, no conocía a Jake de nada ni al chico encapuchado, ¿por qué la ayudarían?, y si fueran el mismo, ¿por qué lo haría?

Aunque de cierta manera, agradecía que fuera así, no soportó ver todos esos mensajes de mujeres atacándola, de hombres pidiéndola por sus supuestos servicios; sin darse cuenta volvió a llorar.

Nunca antes se había sentido así, en esos momentos deseaba que alguien estuviera a su lado, que le dijera que todo era una pesadilla, una pesadilla de la cual pronto despertaría, seguiría con su vida de universitaria junto a sus amigos.

Pero desgraciadamente, aquella pesadilla era real. 

Hundió su rostro en la almohada y soltó un grito desgarrador al punto de lastimarse la garganta, no podía creer que Hannah hubiera hecho eso. 

Escuchó el timbre y supuso que debían ser Jessy y Richy, se levantó aún con lagrimas bañando su rostro y caminó hacia la puerta, en el camino trato de retirar sus lágrimas pero era inevitable, salían cada vez más y más.

Abrió la puerta encontrándose con ambos, no pudo evitar llorar más y se apresuró a abrazar a la pelirroja, la cual también comenzó a llorar al escuchar a su mejor amiga tan mal, Richy tampoco pudo evitar llorar y se unió al abrazo tratando de hacer sentir segura a Mc.

Mc los necesitaba demasiado.

—Mc... —mencionó con voz desgarradora, no soportaba escuchar a su amiga llorar así.

—N-No puedo Jessy, y-yo trate p-pero no p-pude...

Así estuvieron por varios minutos, hasta que decidieron ir a la habitación de Mc para que volviera a recostarse, la chica abrazaba un peluche mientras seguía llorando, sus amigos no sabían que hacer.

Nunca la habían visto tan vulnerable.

—Mc, trata de entender- 

Fue interrumpido por la voz furiosa de Jessy.

—¿¡Entender que Richy, entender que por Hannah nuestra amiga ahora es víctima de acoso y es la mira de todas las burlas posibles, vas a volver a justificar a Hannah!?

El rubio solamente bajó la mirada quedandose callado.

—No lo puedo creer, eres igual a esa bola de pesados, solamente ves lo "indefensa" que es Hannah pero realmente, eres un ciego que no se da cuenta del daño que le esta haciendo a Mc, dime Richy, ¿qué tiene que pasar para que te des cuenta de que Hannah no es tan santa como la pintas? —lo encaró con mucha molestia, sin poder creer que el chico que le gustara estuviera actuando así.

—Yo-

—No hables conmigo, habla con Mc.

El rubio sabía que la pelirroja tenía razón, inconscientemente le había hecho daño a Mc por apoyar a Hannah a pesar de los malos tratos que la mencionada le hacía, se acercó a la cama con cautela, donde Mc tenía su mirada pérdida mientras seguía aferrada a aquel peluche, tocó su pierna en espera de que Mc reaccionará y así fue.

—Mc... Lo siento —tomó su mano y siguió hablando —. Lo siento mucho, siempre puse a Hannah como prioridad por su depresión antes que a ti, no me di cuenta del daño que le hacía a mi mejor amiga, trate de mantenerme neutral con toda esta situación y, al ver al extremo que llegó Hannah publicando eso de ti, no supe que pensar.

—R-Richy, yo no hago esas cosas —le habló entre llantos, se sentía minúscula, quería desaparecer, que ya nadie le hiciera daño.

—Yo sé que no Mc, sé el valor que te tienes y que jamás harías algo así, no por voluntad propia, y por eso más que nunca siempre estaré contigo; no voy a dejar que alguien quiera sobrepasarse contigo por cosas que no son —le habló firme, mostrando su sinceridad.

Y Mc, nunca se había sentido tan agradecida en algún momento de su vida.

—¡Ahora sí te pasaste de la raya Hannah, ¿cómo se te ocurre inventar semejante calumnia sobre Mc?! —reclamaba la rubia mientras seguía a la castaña hasta su habitación.

—Por favor Lilly, esa tipa no es una santa como la pintan, yo solo dije la verdad.

—¡Claro que no Hannah! Mc es la chica más pura que he conocido en mi corta vida, no se merecía que dijeras esa mentira sobre ella.

—Da igual, no iba a dejar que las cosas se quedarán así después de como me trato.

—¡¿Ves, ves como si es mentira? Hannah por favor!

—¡No Lilly, no voy a cambiar de opinión, por mi; que la violen y después la maten para que así pueda ser feliz de una vez por todas! —gritó aquello último dejando a su hermana sorprendida, se fue de ahí dejándola sola.

Lilly no lo podía creer, ¿tanto era el odio que tenía Hannah hacia Mc? Y lo peor es que no podía hacer nada, no tenía pruebas para demostrar que su hermana mentía, y aunque las tuviera nadie le creería, por el simple hecho de la depresión de su hermana.

Mañana hablaría con Mc para demostrarle que tenía todo su apoyo y que de ser necesario, la defendería de las demás chicas que quisieran atacarla con comentarios ofensivos.