Tres chicos con un pasado traumatico compartido, causado por la persona que se supone debería haberlos protegidos.
Actualmente jóvenes la trauma de sus pasados aun los persiguen y cada uno lo lleva de una manera diferente.
Tres jóvenes entraran a su...
En una casa completamente lujosa casi como una mansión, los colores entre blanco, celeste y rojo decoraban tal hogar. El hogar tenía un jardinero, un cocinero y unas tres mucamas o como los llama wen ruohan empleados o gente de la servidumbre.
Lan qiren lo regaña por eso, para él son gente que necesitaban un empleo y que ellos pudieron dárselo. Aun así en el pasado wen ruohan lo decía con arrogancia, hoy solamente lo dice para molestar a su esposo y a pesar de que lan qiren lo sabe no puede evitar molestarse por eso.
Un hombre de vestimentas claras, cabello corto y negro y de ojos celeste, se encontraba en la cocina de su hogar sobando su estomago, últimamente el hombre no se siente bien su cocinero le prepara un té especia para el dolor de estomago.
—Señor qiren, tenía una llama— anuncia la mucama apenas entró.
—¿Quién es? Depende de quién se trate atenderé, si no dile que no me encuentro disponible.
La mujer se inclina —Lo lamento mucho, pero no dio su nombre solo dijo que es su mejor amigo.
Lan qire frunce el ceño —¿Mi mejor amigo?.
—Así es señor, dijo que lo son desde el jardín de infantes.
—¿Jardín de infantes?....ha tomaré la llamada— la mujer asiente y se retira, no tarda en volver con el teléfono inalámbrico en la mano.
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Un hombre con vestimenta complementa cara, cabello castaño oscuro atado por una pequeña cola de caballo y de ojos rojos, baja las escaleras de su hogar, a medida que se va acercando a la cocina oye la voz animada de su esposo.
Para cuando él entra lan qiren ya había cortado la llamada —¿Quién era?— preguntó mientras se acercaba y le daba un beso en los labios.
—¿Recuerdas ese amigo de la infancia del que te hable e incluso te muestro una fotografía?— wen ruohan se posa detrás de él y lo abraza.
—Ha si ¿Que tiene?— pregunto desinteresado.
—Acaba de llamar, se quedará con nosotros por un tiempo.
—¿Por qué, con nosotros? ¿No tiene otros amigos?—comenzó a hacer berrinche.
—Por que es mi amigo y soy el único que conoce en este pueblo— dijo dándole pequeñas palmadas en la cabeza —Es mejor que aceptes o sino...
—O sino ¿Que?.
lan qiren le sonríe —Despídete de tus noches de pasión— se separó de sus brazos para pararse e irse a la sala.
Wen ruohan se quedó en la cocina haciendo berrinche por unos minutos más para luego seguirlo, con un puchero en la boca —¿Por cuanto tiempo?.
—Hasta que encuentre un departamento— dijo mientras revisaba el periódico.
—¿Y porque no busca un departamento y luego se mudo al pueblo?— se recostó en su lujoso sofá para colocar su cabeza en el regazo de lan qiren.
—No lo se, tal vez necesita hacer algo aquí que ni siquiera tiene tiempo— ambos estuvieron así por un tiempo, hasta lan qiren termino de leer el periódico —¿No tienes que ir a trabajar?.
