Pierrot

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Advertencias: Especial de Halloween, un poco tarde, pero seguro. Probablemente haré para la ADA y La decadencia.

Pierrot es un personaje del siglo IX de la comedia del arte.

Pierrot es un personaje del siglo IX de la comedia del arte

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~•~

Otro halloween en la Port Mafia. Claramente no era como otras empresas donde decoran con telarañas y cadáveres falsos, los cadáveres no son necesarios porque abundan todo el año. Al final terminan teniendo una noche libre con alcohol y otros excesos.

La fiesta de la mafia era la única noche donde todos pueden ser tan inmorales como quieran, lamentablemente tú no conocías la regla de la Port Mafia y te apareciste disfrazada de un payaso con lágrimas negras y mueca triste.

Chuuya casi se orinó por ver su expresión de confusión al ver tantas mujeres y hombres semidesnudos— ¿Eres un payaso?

—Soy Pierrot, un personaje trágico —murmuraste desanimada.

—Eres un puto payaso.

Pero nada supera la respuesta de Tachihara (vestido de vampiro) "Oh, eres un payaso sin coger, divertido". La noche no fue tan agradable las primeras dos horas, hasta que poco a poco comenzaste a soltarte para conversar con otros miembros.

De repente se hicieron las tres de la mañana, y aunque la mayoría se había ido para satisfacer otro tipo de deseos, todos los presentes se mantenían de pie. Incluso Chuuya tambaleaba con la copa de vino en la mano.

—Contemos historias de miedo —dijo Higuchi tratando de sostener una conversación con el mayor de los Akutagawa.

Rápidamente alzaste la mano—. Yo sé muchas.

Cierto pelirrojo de chamarra verde te interrumpió tomando su turno—. Cuando trabajaba para cierta organización, escuché a una niña gritar en uno de los cuartos contínuos al mío, era un ruido inhumano que me despertaba justo a la media noche y se detenía minutos después... —apretó los hombros de Gin para sacudirla—. No se les permitía el paso a los menores, porque la hija de cierta persona murió ahogada.

El jefe sonrió de lado, pero Chuuya tomó la palabra—. ¿Dónde trabajabas? Pensé que eras un vago al que echaron de casa.

La pequeña rubia salió de la sombra del jefe para contar su propia anécdota sobrenatural—. Rintarō estuvo en la primera fila del ejército, yo le ayudaba. Ví morir a una señora que estaba cerca de un tiroteo, mucha sangre y sus viseras regadas, era una obra de arte. Rintarō apenas pudo con la culpa de verla morir protegiendo el cuerpo de su hijo —extrañamente el hombre no decía nada, no iba a interrumpir al pequeño demonio—. Hubo otro enfrentamiento al día siguiente por la madrugada, cuando apilaba los cuerpos noté que estaba la misma mujer. Y la ví durante el resto de la gran guerra. Seguramente quería proteger a su hijo, incluso cuando ya estaba muerto.

Chuuya alzó la ceja, por sorpresa ya no lucía tan ebrio—. Cuando era adolescente vivía en una casa compartida, es la manera elegante para decir que vivía con un montón de personas sin hogar —bajó la mirada a su copa y dió otro sorbo—. Me vestía horrible porque era pobre, solo eso.

Mató el ambiente, pero Kōyō comenzó a contar su propia historia—. Durante mis primeros pasos como alguien de renombre en la mafia, manejaba un burdel. Era común ver a mujeres desesperadas con hijos de algún cliente descuidado. Recuerdo su nombre, era Bella y al igual que muchas se enamoró de un cliente que le prometió que se casarían. Le compró un vestido hermoso y perlas para verse como una verdadera dama, pero al final se arrepintió y la dejó esperando en un altar... lloró toda la noche hasta que regresó al burdel para colgarse. Pobre chica, cuando la bajaron aún apretaba la carta que le envío junto a sus regalos.

—Eso fue espeluznante, Kōyō-kun ¿Tienes alguna interesante, Akutagawa-kun? Nos encantaría escucharla —interrogó el de cabellos lacios.

Era prácticamente una orden a la que no se podía negar—. En el barrio mortero se acostumbra ver a personas morir, sobre todo a niños víctimas de la negligencia. Pero gran parte de los casos eran por la bruja del barrio mortero. Fue antes de la llegada de los militares que comenzaron a desaparecer niños por esa zona, incluso antes de que existiera el barrio como tal. La responsable era una viuda que se presumía había pactado con el diablo en busca de la vida soñada. Al ser una zona que eventualmente fue poblada por la base militar no tuvo más remedio que esconderse, pero rápidamente fue encontrada por sus vecinos. La golpearon días y noche, hasta que la sangre era tanta que tenían que ponerla en baldes, al final la mataron, pero la mujer juro volver por cada vida de los infantes. Lo juro con su sangre y se cumplió.
Yo la ví, era alta para ser una mujer y vestía de negro, sus uñas eran puntiagudas al igual que sus dientes. Estábamos dormidos uno junto otro para evitar el frío y al verla caminar frente al callejón lo único que pude hacer fue aferrarme a Gin, y cubrir sus ojos por si los abría, no la viera. Me sonrió con esa gran boca que chorreaba sangre e incitaba a salir corriendo. Se llevó un dedo a los labios para indicarme quedarme en silencio. Nunca le tuve miedo a los fantasmas, me daba más miedo el hambre de mi hermana, pero por primera vez, sude frío.

Fue por mucho la mejor narrada. Ahora sí tenían los pelos de punta. Y si darte cuenta te miraban de arriba abajo esperando una historia—. En mi pueblo hay una leyenda conocida como la llorona. Enloqueció y asesinó a sus propios hijos en el río. Desde entonces vaga por las calles en busca de los niños y asusta a quienes se topan con ella.

Todos permanecieron en silencio hasta que la luz empezó a parpadear y el aire era asfixiante. Una ventisca procedente del pasillo los hizo sudar frío.

—Creo que debo irme...

—¡Yo también! —y así cada uno se despidió dando por finalizada la noche de Halloween sin darse cuenta de la pequeña presencia al fondo del salón, mirando con recelo a los vivos.

—¡Yo también! —y así cada uno se despidió dando por finalizada la noche de Halloween sin darse cuenta de la pequeña presencia al fondo del salón, mirando con recelo a los vivos

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Ay dios, recicle una historia de otro escenario que jamás publiqué. ¿Qué es su cosa favorita de estas fechas? A mí me encanta el pan de muerto, y olor a cempasúchil. Normalmente no me gusta vivir en México, exepto el día de muertos.
-Honey.

Bungou Stray Dogs (Cosas de BSD)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora