Capítulo 57 "Te Amo"

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A las afueras de la Clínica, el Uzumaki se paseaba como león enjaulado, completamente dominado por la angustia y la preocupación, Itachi ya habia logrado ingresar al sistema de cámaras, solo para encontrar una grabación de tres hombres peleando e hiriéndose entre ellos, unos disparos, que no lograba comprender muy bien, solo hasta que vio a uno de ellos iniciar un incendio en el cuarto piso. Estaba listo para tomar acción, pero recibió una llamada aún más inesperada.

- Esto tarda demasiado – indico Sasuke - ¿Cómo es que nadie va a tener noticias? – Karin lo seguía con la mirada – ya prácticamente evacuaron toda la Clínica

- De seguro escaparon por una salida alterna, por mayor seguridad – viendo como Suigestsu cortaba el teléfono

- Es oficial, las señales están muy erráticas, quizás por eso no podemos comunicarnos con ellas y... - Itachi aparece con el semblante agitado

- ¿Qué paso? – pregunto veloz Karin - ¡¿Descubrieron algo?! ¡¿Dónde están?! – mirando fijamente su mirada de terror - ¡Itachi, habla por Dios!

- La Mansión Hyuga no existe – los primos se miraron confundidos

- ¿Qué? – consulto Sasuke

- Lo que escuchaste – insistió tragando en seco – pusieron una bomba en la Mansión Hyuga, el lugar entero está ardiendo – saca su teléfono y les muestra la señal en vivo del noticiero de la mañana – no han logrado sacar a nadie con vida...

Sasuke y Karin se mantuvieron la mirada completamente sorprendidos, sobrepasados y tan extrañados ¿Por qué esto estaba pasando justo ahora? ¿Qué significaba? ¿Estaba relacionado? ¿El Hyuga estaba muerto? ¿Por fin tenían justicia? ¿Boruto era libre? ¿Ellos eran libres? ¿Se acabo? La respiración de ambos parecía sincronizada en su desesperación.

- Pero... - el teléfono de Sasuke sonó y este le respondió con urgencia - ¡Cariño! – la voz al otro lado devolvió la esperanza a su cuerpo - ¡¿Dónde están?! ¡¿Están a salvo?! ¡¿Están bien?! – le devolvió una sonrisa amplia a Karin y esta suspiro sumamente aliviada - ¡No te muevas de ahí! ¡Voy para allá! – comenzando a correr - ¡Te amo! – grito avanzando entre toda la gente

Itachi sintio el relajo al saber que estaban bien y a salvo, y por alguna extraña razón, lo hizo sentir muy feliz el ver a Sasuke tan contento y aliviado, lo torturo de sobremanera el verlo llegar tan devastado y angustiado, y ahora que lo volvía a ver sonreír, él también se sintio feliz; es como si estuviera contento por ver a Sasuke feliz, más que por saber que Sakura y Boruto estaban bien. Karin iba a seguirlo, acompañada de Suigestsu, pero una persona salió por la puerta principal y las alarmas en todos los presentes se encendieron.

- ¡No disparen! – grito Itachi - ¡Es el hombre que inicio el incendio! – lo reconoció por el video - ¡Lo quiero vivo!

El hombre se quedó de pie frente a la puerta principal, completamente absorto en su dolor y angustia, acaba de asesinar a un completo extraño solo por su odio e ira incontenibles, habia herido al hombre que por años considero su único hermano y la Mansión ardía ¿Por qué se sentía así? ¿Por qué la paz no llegaba a él? ¿Qué más necesitaba? Las miradas atentas, las cámaras encendidas captando cada uno de sus movimientos y las armas apuntándolo, le dieron una posible respuesta.

- ¡Mi nombre es Kisame! – grito a todo lo dieron sus pulmones - ¡No tengo apellido porque años atrás me lo arrebataron! ¡Junto con mi niñez y el derecho a una familia! – el silencio reino en el lugar - ¡Junto con mi vida! – inhalo con fuerza - ¡Estoy aquí para decir la verdad! – mete su mano en el bolsillo y saca un pequeño control

- ¡Tiene una bomba! – grito alguien a lo lejos

Y el pánico se apodero de todo el lugar, todo el mundo empezó a correr y a gritar, mientras la policía cerraba aún mas el perímetro, Itachi movilizo rápido a todos sus hombres, mientras Karin miraba aterrada para todos lados, Sasuke tenía que encontrar a Sakura lo más pronto posible, mientras Suigestsu no despegaba la vista del joven, se veía asustado, cansado y sumamente atribulado, como si ya se hubiera rendido, y solo le quedara una cosa más que hacer.

Cuanto Odio AmarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora