Gotas caían sin cesar.
Luego del estruendoso golpe, solo había silencio en el ambiente. El viento podía oírse a kilómetros y cortaba con la más fina indiferencia.
Un hombre se acerca a la escena, observa el vehículo que hace pocos minutos perseguía y niega con la cabeza, al parecer su plan, no ha salido como el planeo. Se gira y mira al hombre que choco el auto, piensa por un segundo el dispararle por arruinar su plan maestro, pero no desea ensuciarse las manos, devuelve el paso a su vehículo y se aleja de ahí y de los mirones que comienzan a aparecer.
Comisaria
Suigestsu ya llevaba un buen rato revisando la base de datos, rastreando las tarjetas de crédito de Naruto o Hinata, esperando encontrar una reserva en algún lugar, y comenzaba a perder la fe de poder hallar una pista, hasta que algo apareció, a nombre de Naruto, una reserva para unas cabañas a las afueras de Tokio, no alcanzo siquiera a respirar cuando sonó su teléfono, pensó en cortar al instante, debía llamar a Sasuke y avisarle, él estaba más cerca, pero al mirar la pantalla, se dio cuenta que era el mismo Sasuke quien lo llamaba, parece que se estaban llamando a través de la mente
-¡Sasuke! – contesta rápido el policía - ¡Los...
- ¡Ya sé dónde están! – grita eufórico Sasuke - ¡Como no lo recordé antes! – se escuchaba como buscaba algo – aquí están... - tomando las llaves – están en unas cabañas, a las afueras de Tokio, a 30 minutos de la ciudad... - cerrando la puerta de la casa – nos quedamos una vez ahí cuando éramos niños... - entrando al auto – son las cabañas...
- Nichibotsu (Atardecer) – respondió Suigestsu – lo sé, los acabo de rastrear a través de la tarjeta de crédito de Naruto
- ¡Brillante! – dice Sasuke encendiendo el auto – voy para allá ahora mismo
- Te... – suena la alarma - ¡Demonios!
- Suigestsu – pasa corriendo Itachi – tenemos un robo grande en el banco central, debemos irnos – corriendo - ¡Ya! ¡Y los necesito a todos! ¿Dónde está Karin?
- Sasuke... - dijo apenado el policía – no puedo acompañarte, tenemos un operativo en marcha – tomando sus cosas – y debo llamar a Karin – bajando las escaleras – avísame por favor como sale todo
- Si – responde rápido – en cuanto tenga información, te aviso... - corta
Suigestsu miro la llamada cortada y volvió a marcar, esta vez a su novia, la cual estaba sentada aun esperando a Sakura, quería salir a buscar el teléfono y ver si Suigestsu y Sasuke habían conseguido algo de información, pero sabía que su principal fuente de información estaba en esa sala, si solo Sakura pudiera salir y explicarle todo, la tal Moegi se paseaba frente a ella y eso comenzaba a desesperarla. No pudo aguantar más y salió a buscar el teléfono, y cuando estaba por marcar, Suigestsu la estaba llamando
-¡Karin! – se escuchaban sirenas de policía
- ¡¿Qué pasó?! – preguntó aterrada
- Hay un operativo en marcha – respondió Suigestsu – en el banco central
- ¡Dile que nos vemos ahí! – le gritó Itachi - ¡Ahora!
- Pero...
- ¡Es una orden! – grito Itachi
- ¡Maldición! - grito más para dentro Karin - ¡Esta bien! – mirando por las ventanas de la torre Tokio ve humo saliendo de un edificio, no debía ni siquiera pensarlo, sabía qué lugar era. El Banco Central. Volvió su mirada a la sala llena de gente y vio que la puerta aún no se abría, Sakura aún estaba ocupada, busco y vio a la tal Moegi - ¡Oye tú! – le grito acercándose aun con el celular en la mano, lo que provoco que el ballet la siguiera y la sujetara - ¡Suéltame o te arresto! – el hombre obedeció – que amable... - mira a Moegi – cuando Sakura salga, dile que estuve aquí y que necesito que se comunique conmigo, de manera urgente – la mira fijo - ¿Oíste? ¡Urgente!
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Cuanto Odio Amarte
FanficEn las grandes ciudades el amor también se hace presente y aunque es mal veloz, no significa que sea menos profundo y que no se ame como en las grandes literaturas... Esta es una historia, como cualquier otra, que empezó con dos personas enamoradas...