Capítulo 16: ¿Te haces la victima o eres la victima?

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El miércoles llegué a la clase de historia, ese día tocaba uniforme de gala asi qué en lugar de mis calcetas largas, me puse mayones para que no se me vieran las piernas y la bufanda que me iba a poner la traía en la mochila.

Así que al tomar asiento la saqué de mi mochila y me la coloqué en la cabeza, José al verme se empezó a reir.

-A,ja,ja,ja. ¡Pero pontelo bien! - Me acomoda con fuerza la bufanda, con el fin de que no se me viera la boca.

-¡Oye! -Grito porque el tiron que me había dolido.

-¿Qué?, ya te vas hacer la victima. ¿Así o más obvia?. -Se voltea y continúa- Me estás dejando a mí como el hombre machista y tú la victima -. O sea... ¿en qué momento eso fue mentira?.

-Pero si tú me lo pediste que lo hiciera... - Contesté confundida.

-¡Ay sabes qué!. ¡No te lo quites, y ni mucho menos en inglés!. Para que se te quite -. Y fue así como se terminó la conversación y acate sus ordenes.

* 1:00 pm *

-Luna... ¿Puedo hablar contigo? - Danna se acerca a mí cuando estaba arreglandome en los baños de mujeres. -¿Por qué usas la bufanda así?, si yo sé que no estás enferma-. Me sorprende su pregunta y no me sale ningúna palabra. -¿Es por José?, ¿Cierto? - Mis ojos se llenan de lágrimas.

-Sí... - apenas y pude contestar. Mi garganta tiene un gran nudo. -Es que el lunes se molestó demasiado conmigo por el vestido que llevé a la fiesta de Isabella y pues me dijo "que por eso nos violan" -Me seco la lágrima con el pañuelo que tenía en mi bolsillo.

-O sea... sí es mi amigo José, pero que no mame. Me caga que digan eso -Sus ojos reflejan un gran odio. -¿Sabes qué? -Cambio radicalmente su tono de voz.

-¿Qué? -Pregunto.

-¡Quitate esa porquería!. ¡Y cuidado con que te la vuelvas a poner! -Exclama Danna y me arrebata la bufanda.

***

Era un viernes por la mañana, ya me había alistado para salir a la plaza con Armando. Dejé todos mis deberes hechos pues un día antes había avisado que saldría con él.

-¿Ya está lista la futura madre de mi hijo? -Se para Armando del sillón de la sala de espera.

-¡Obvio! -Me toma de la mano. Y salimos de la casa hogar, su amigo Charly le habia prestado su coche para que asi no caminaramos tanto y no me cansara por la tremenda panza que cargaba.

-Siempre que te veo me haces la vida más feliz - Me toma de la mejilla -Prometeme que jamás nos ocultaremos nada, prometeme que si nos caemos, nos levantaremos con el pie derecho- De repente se puso demasiado romántico.

-¡Claro, Claro! . Tendrás mi palabra que jamás perderemos la confianza y que nuestro amor será la base de nuestro futuro- A decir verdad, yo igual prendí el foco de las cursilerias.

-Ya que estamos y seguiremos en confianza, te tengo que contar algo... - La voz de Armado cambia repentinamente.

-¿Qué pasó? - Pregunto intrigada

-La verdad es que antes de ti, antes de que me enterara de esta bella noticia estaba pensando mal - Su voz se escucha cada vez mas baja.

-¿Como que estabas pensando mal? -Pongo mi mano sobre su pierna.

-He tenido demasiados problemas, tanto familiares como amorosos... Y en verdad, había estado pensando mal -Voltea a otro lado para evitar la pregunta

-¿Cómo que pensando mal?... - Le agarro su mano que sostenia la palanca del coche.

El Morado De Sus MentirasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora