Raro

3.1K 342 124
                                    

Cuando entraron de nuevo a la casa, Alfa hablaba con Romina y María Laura, que escuchaban, para sorpresa de Agustín en silencio.

- Mejor andemos con cuidado o la Tora en cualquier momento trompea a alguno - comentó Daniela mientras arreglaba las uñas.

- Lo extraña a Juan - la excusó María Laura.

- Dale, Cata, si todos sabemos que las jodas del otro día las hizo él - todos se quedaron en silencio, lo que el mayor tomó como una invitación - Por eso lo echaron: la gente lo castigó, castigó la mala onda y la maldad -

- La Tora cambió - agregó Julieta - Juan la cambió -

- Y a Nachito - asintió Daniela - Nachito cambió un montón -

- Todos cambiamos - cerró Romina la situación - Pero intenten no decirle nada a la Tora -

- La Tora va a estar bien si yo no le habló - respondió Agustín. A su lado, Marcos cevaba el mate en silencio.

- Buenísimo, no le hables - le pidió Romina en tono dramático y todos rieron. Hasta se arrodilló en el piso - Te lo pido por favor -

Las carcajadas atrajeron a Thiago y a Nacho, que de nuevo volvia a pegarse al morocho.

- ¿Qué onda che? - preguntó Thiago, abrazando a los dos primos.

- Primos - saludó Nacho, manteniendo una expresión seria. Agustín no pudo evitar pensar que era como un mini Juan.

- ¡Che, juguemos algo! -  les pidió Coti, saltando hacia ellos.

- ¿A qué? - le preguntó Agustín, abriendo los brazos para darle un abrazo.

- ¡A cualquier cosa! -respondio la rubia, dandole un abrazo.

Cuando se dio cuenta, él y Marcos estaban corriendo carreras aerobicas, según Coti; Julieta y Daniela, y no podían doblar las rodillas al correr. Obviamente los dos hicieron trampa varias veces, agarrando al otro o tirandose encima del contrincante; Nacho vigilaba desde atrás para que ninguno saliera de la línea.

Recordó que Marcos quería que actuen como una 'pareja normal' y no pudo evitar pensar que eso era justamente lo que estaban haciendo: se hacian cosquillas, se daban abrazos y mimos sin que nadie dijera nada; ya que estaban en medio de un juego y quedaba como un juego entre dos amigos.

Aunque cuando volvieron con las chicas al living y empezaron a hacer su sesión de preguntas incomodas, Agustín se tiró en uno de los sillones y Marcos se acostó a su lado, practicamente usando su cola como almohada.

¿Lo miró? No, porque si lo hacia se iba a morir de risa.

¿Le molestaba? Para nada.

Incluso cuando cambiaron de lugar y Marcos se tapó con una manta, se sentó pegado a su costado, así que él respondio apoyandose en su hombro derecho o su muslo, incluso se acurrucó en su cuello algunos minutos; hasta que Marcos se sintió incomodo con el tema de la locura momentanea de Lucila y se fue a dormir.

Agustín lo siguio después de un rato, todavia con el sueño cambiado e insomne desde el final de la prueba del bote. Tuvo que contener un suspiro de cansancio cuando vio a la loca en su dormitorio, hablando con Marcos y Alexis, aunque los dos hicieron una mueca cuando Daniela lo siguio adentro del dormitorio junto con Thiago.

- ¿De que hablaban? - preguntó la morocha, sonriendo.

- Del amor - respondió Alexis - 

- Ay, el amor... - suspiró la morocha.

Agustín se acostó con la ropa que tenía puesta, interrumpiendo poco y nada en la charla hasta que le preguntaron que fue lo más fuerte que hizo por amor.

- Pues yo tenía la cajita para los anillos... pero no alcancé a comprarlos -

- ¿Qué? - chillaron Daniela y Lucila -

- ¿Vo' te iba' a casar? - preguntó Thiago sorprendido.

- ¡Sí! - respondió feliz, hasta que Marcos, que se había volteado hacia la puerta para poder dormir, se sentó y le guiño el ojo - ¿Qué? ¿Te levantaste solo para guiñarme el ojo? - le preguntó divertido.

- ¿Enserio te iba a casar? - le preguntó el salteño en un tono extraño, que no supo reconocer.

- Sí, el año pasado - aclaró - Incluso traje la cajita donde van los anillos -

- Ayyy, que dulce - Daniela lo miró conmovida - Yo la quiero, te la acepto, casemonos ya -

- ¿De verdad te ibas a casar el año pasado? - le preguntó   Marcos, que parecía shockeado.

- Que sí. Yo cuando estoy enamorado hago cualquier cosa, incluso casarme; aunque no por iglesia - aclaró el más bajo - Pero ya les dije que no llegué, así que no importa -

- No puedo creer que te iba a casar... - Marcos lo seguía mirando fijamente. Agustín reconoció en su expresión una mezcla de sorpresa, confusión e incomodidad.

- Yo tampoco, ¿quien se quiere casar a mediados de los veinte? - preguntó Alexis, desviando la conversación.

Al final, Lucila volvió a su habitación y Agustín y Thiago salieron con ella, ya que no podian dormir. Agustín le sonrío cuando pasó al lado de la cama del primo pero este le devolvio una mueca.

- Se re traumo el Marco - bromeó Thiago, guiando al otro hacia la cocina. Preparó un té para cada uno y le preguntó acerca del juego.

Agustín no supo cuanto tiempo hablaron, solo que pararon cuando Thiago dijo que estaba cansado y los dos fueron hacia la habitación. Él se desvió para lavarse los dientes e ir al baño. Cuando salió del baño, se encontró de frente con Marcos.

- Primo - lo saludó sonriendo.

- Primo, ¿podemo hablar? - le preguntó el salteño. De golpe, Agustín fue consciente de la gran diferencia de altura entre ambos.

- Sí, dale - aceptó.

Pero en vez de dejarle espacio para salir, Marcos entró con él al baño y cerró la puerta.

.................

Primos y primas, me pasó algo horrible: escribiendo en la computadora se tildo el wifi así que se borraron algunas cosas, asi que no pude escribir tanto como quise.

Gracias por sus palabras de apoyo, me animan un montón y de verdad espero que se vengan tiempos mejores.

Los quiero ❤️❤️

Porque él es mi amigo [Marcos/Agustín] GH 2022Donde viven las historias. Descúbrelo ahora