Porque él es mi amigo [Marcos/Agustín] GH 2022

Te quiero, tarado: sos mi Agu, soy tu Marquitos

Delirio.

A ese punto había llegado.

No tenía otro nombre, dado que la cosa más cercana a él en esa cada era un peluche en forma de banana.

Podía agregar obsesivo o deprimido pero todo parecía deberse a que Agustín se fue.

Coti se quedó sin su cómplice, sin su tapadera.

Alexis se quedó sin alguien con quien hablar del juego de manera neutral, al igual que Thiago, que ahora no entendía directamente nada de nada; especialmente cuando Daniela también fue expulsada.

Alfa, Romina, Julieta y Nacho se quedaron sin nadie sobre quien quejarse.

Maxi estaba tan encerrado en sí mismo que ni se fijo en lo que pasaba.

Ariel y Camila bajaron tres cambios, pero sabía que ella hablaba mal de Agustín y eso no se lo iba a perdonar.

- Solo somos vos y yo - suspiró Marcos, tirado en la cama de Coti, abrazando a su banana.

Iban a ser casi dos semanas.

Se había ilusionado levemente con la idea de ser nominado, dado que su único aliado se había ido según los demás, e irse con Agus y su gente pero no: el ser salvado primero le había dado una especie de armadura anti nominaciones.

Pero no contra la casa.

Se encogió cuando su estómago gruñó: tenía hambre.

Hacer ejercicio y comer poco no era saludable pero Alfa y Romina eran insoportables con el tema.

Se lo hacian al Agus y ahora a él.

Pero la que más le preocupaba era Coti: estaba completamente sola y a ella se le iban a tirar como tiburones.

Creyó que la entrada de Juliana iba a ayudar en algo pero no: fue horrible.

Porque ella no es Agus.

Decidió salir a tomar aire, encontrándose solo a Ariel afuera.

- Hola hermano - lo saludo sonriendo - ¿Tomamos un tecito? No te ves bien -

- Dale, yo lo preparo -

Marcos no le dio tiempo al otro de levantarse y fue hacia la cocina, agarrando dos tazas, ignorando la voz chillona de Juliana, aunque dejó que esta lo abrazara y le cantara en el oído.

Aparentemente le había dicho a Maxi que él era fuerte afuera y eso hizo que todos le anden encima: no que lo tratarán bien, sino que le estén por atrás todo el santo día.

Eso explicaba el comportamiento de los dos nuevos hacia él.

Aunque se contuvo de pensar mal de Ariel porque era el que más le hacía compañia: incluso empezó a hacer ejercicio solo para no dejarlo solo.

- Gracias viejo - le agradeció el mayor cuando le dio la taza con té - ¿Estas bien? -

- Sí - asintió el salteño, sentándose en uno de los sillones individuales.

- Los chicos dicen que vos querías que volviera Agustín - le comentó y le sonrió con tristeza - Todavía le queda una chance, no bajes los brazos -

- Si, ya sé - asintió y tomo un largo trago - Él va a volver con Dani o con La Tora, solo me preocupa que se está tardando -

- ¿Es verdad que él dijo que iba a volver pronto cuando se fue? -

- En dos semanas - le aclaró Marcos, sonriendo con tristeza.