Coast

Capítulo 45: normalidad

Cuando Hailee y yo volvimos a la habitación, nos cambiamos rápidamente por ropa más cómoda y nos acostamos en la cama. Tan rápido como me acomodé, Hailee me rodeó con sus brazos y me atrajo hacia ella. No puedo evitar sonreír una vez que siento su cercanía.

-No sabes lo mucho que extrañé esto -dije colocando mi cabeza en el hueco de su cuello-

-Yo también pequeña, yo también. -dijo apretándome más contra ella-

 -No sabes las ganas que tengo de mandar los planes de mañana a la mierda y simplemente encerrarme aquí contigo -dije riendo por lo bajo- sería muy divertido -dije besando lentamente su cuello-

-No tengo dudas de eso -dijo Hailee mientras me daba más espacio en su cuello para que siguiera besándola- pero ya se lo prometimos a las chicas

-Oh vamos, no se molestarán. De hecho, si estuvieran en nuestra posición, estoy segura que nos plantarían sin pensarlo -dije riendo- Además, tenemos tiempo que recuperar y me prometiste que tan pronto me vieras, no me dejarías salir -dije continuando mis besos- y creo que se me ocurren varias maneras de mantenernos entretenidas aquí adentro -dije lentamente mientras mi mano subía lentamente a su trasero y lo apretaba-

-Esstta Bbien -dijo Hailee entrecortada- tu ganas, le escribiré a Ella para decirle que no nos esperen mañana.

-Esa es mi chica -dije buscando sus labios-

-Esa noche no hicimos el amor, pero si nos besamos tanto que terminamos con los labios muy rojos. En ningún momento dejamos de abrazarnos y cuando al fin nos dormirnos, puedo asegurar que casi era como si fuéramos una sola persona.  

A la mañana siguiente, siento como Hailee me está dando suaves besos en el cuello. Por inercia sonrío y la acero más a mi para que continúe con su trabajo.

-Buenos días Haiz -dije abriendo los ojos- 

-Buenos días pequeña -dijo la chica mirándome sonriente-

-Nos miramos por unos segundos hasta que rompo el silencio- creo que merezco un beso de buenos días, no?  -dije mientras la abrazaba más fuerte-

-Pero si te di como 100 para que despertaras -dijo Hailee riendo suavemente mientras se acercaba-

-Si, pero falta el más importante -dije rozando nuestros labios- ahora ven aquí -dije besándola suavemente-

 Sus labios eran tan suaves, los amaba. Sentía que encajaban tan bien con los míos y la verdad es que nunca tenía suficiente de ellos. Cuando nos separamos Hailee me sonreía.

-Que pasa? -dije confundida- 

-Que amo esto -dijo apuntándonos- no sabes cuanto había extrañado despertar así 

-Te entiendo -dije- yo también lo extrañaba muchísimo. -respondí mientras acariciaba la espalda de Hailee-

Nos quedamos unos minutos sin decir nada, yo seguía acariciando su espalda, hasta que decidí meter mi mano por debajo de su blusa y así poder acariciar su piel. Sentí como el vello de su espalda se erizaba y Hailee se arqueaba un poco.

-Te gusta? -dije susurrándole al oído-

-Si -dijo la chica por lo bajo-

-Seguí con las caricias por unos pocos minutos hasta que siento como Hailee vuelve a besar mi cuello, pero esta vez, de una forma mas lenta, más sexy. Rápidamente siento como mi pulso comienza a acelerarse y en cuanto Hailee lo nota, me sonríe con malicia. Siento como poco a poco Hailee coloca cada una de sus piernas a cada lado mío y con ello, termina colocada encima de mi, sin interrumpir sus besos en mi cuello. Yo muevo mi cuello a un lado, para darle más espacio donde pueda besar y al mismo tiempo, comienzo a sacar mis manos de su blusa para dirigirlas a sus caderas. Primero las acaricio suavemente, pero cuando Hailee me muerde el cuello, mis manos cobran vida propia y se dirigen a su trasero, lo aprieto y acerco a Hailee más a mi. Lo cual ocasiona que la chica suelte un gemido.