Doamnelor | Resident Evil 8: Village (Terminada)

Capítulo 4

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Después de horas, días en realidad, se decidió en llevar su idea de llevar a Francesca con Donna para indagar en su mente y evaluarla psicológicamente, que era lo último por hacer para concluir los estudios más básicos de la menor.

- Francesca - La llamo cuando la vio en la sala

- Dígame, doamna Miranda - Rápidamente se levantó del sillón para girarse y concentrar su atención en ella

Miranda amaba tener tanta relevancia y atención de Francesca en ella, apenas un solo llamado y la menor acudía a ella como las abejas a la miel o al polen.

- Falta un estudio que no hemos realizado - Se acerco unos pasos más a Francesca haciendo notar más la diferencia de altura- Tengo una... hija, que puede inducir alucinaciones en las personas. Con ello se puede evaluar cómo está la estabilidad mental de una persona, ¿Deseas intentarlo?

- Lo que sea, siempre y cuando no sea doloroso, he de aclarar, doamna Miranda - Miraba con ilusión a Miranda- ¿Cómo se llama su hija?

- Donna Beneviento. Vive a las afueras de la aldea, cerca de una cascada, claramente ambas iremos a la casa Beneviento - Se giro para empezar a irse- Alista tus cosas para el viaje, nos podemos ir ahora mismo, ya he notificado a Donna

- No tengo nada que llevar - Le aseguro haciendo que Miranda pare- Extrañamente, confío en usted y su hija

Miranda la miro sobre su hombro ignorando como su megamiceta estaba tan alterada, asintió satisfecha y extrañamente feliz por su respuesta tan segura y honesta.

Ambas subieron a un carruaje con el escudo de Miranda, si bien Miranda podía ir a casa de Donna entre sus cuervos, prefirió ir en su carruaje para que Francesca observara y estudiara más el lugar.

- Doamna Miranda, si me permite, tengo una pregunta para usted - Miranda despejo su mirada del paisaje para verla expectante- ¿Doamna Beneviento es... cómo nosotras? ¿Una infectada?

- Así es - Asintió algo sorprendida por su pregunta- En estos territorios hay cuatro jerarcas que mantienen el control de la aldea y sus alrededores. Lord Heisenberg, Lord Moreau, Lady Dimitrescu y Lady Beneviento, los cuatro son mis hijos, los cuales tienen una mutación con el parasito Cadou.

- ¿Los cuatro son nobles? - Miranda asintió- ¿Y usted los... infecto? - Pregunto lo último con cautela

- Así es, son mis hijos - Concluyo Miranda al ver que ya estaban cerca- Hemos llegado - Anuncio apenas entraron a la zona de Donna- He de notificarte que Donna tiene una compañera y portavoz, Angie. Es una muñeca que tiene implantado el Cadou creando que ella hable, se mueva y, realice sus propios pensamientos y comentarios

Lo último intrigo demasiado a Francesca. ¿Tal era el poder del Cadou para hacer que una muñeca tome vida y hasta sus propios comentarios hasta pensamientos?

Francesca bajo primero para mantener la puerta del carruaje abierto y brindarle su mano respetuosamente a Miranda para que bajara.

Miranda tarareo complacida ante el respeto, caballerosidad y disposición de Francesca ante ella, siempre encontraba tantas cosas atrayentes de la menor que se estaba siendo imposible no mantenerte alejada de ella.

- Buenas tardes, hija mía - Saludo a Donna cuando abrió la puerta

- Buenas tardes, madre - La saludo en un susurro tan bajo que apenas Francesca pudo oírla detrás de Miranda

- ¡¡Bienvenidas sean a nuestra humilde casa!! - Anuncio la muñeca que Francesca identifico como Angie- ¡¡Pero qué mujer tan alta!!

Angie se lanzó hacia Francesca quedando a escasos centímetros de ella mirando boquiabierta ante la altura de la platinada. Francesca hacia ladeado levemente su cabeza curiosa ante Angie, era una muñeca de madera demasiado desgastada, tenía un aspecto tétrico e intrigante según Francesca.