Doamnelor | Resident Evil 8: Village (Terminada)

Capítulo 24

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Francesca admiraba el retrato de las tres hijas de Alcina, eran tan diferentes a como lo son actualmente con la mutación del cadou en su cuerpo.

¿Serían igual de caprichosas antes del cadou como le dijo Miranda?

Físicamente no se parecían nada a lo que ahora son, sus cabellos castaños, pieles pálidas con rastros más vivaces, rostros menos simétricos y sus ojos sin rastros de algún color amaranto casi neones. Se veían tan vivas y humanas.

- Lo sabemos, no somos a como lo aparentamos actualmente - La voz suave y firme de alguna de las hermanas le dijo detrás suyo

Francesca solo asintió sintiendo su presencia a unos pasos de ella, no sabía con exactitud cuales de las tres hermanas eran, pero por su tranquilidad al llegar a ella supuso que era Bela, Miranda le había comentado como era las actitudes de cada una de ellas.

Cuando se giró sobre su propio eje, lo confirmo. En frente de ella estaba Bela Dimitrescu mientras jugaba con su hoz con cierta timidez en su mano derecha dándole un toque adorable a su aspecto aterrador y sádico.

- Buenos días, lady Dimitrescu - La saludo cordialmente- Un placer verla, nuevamente

El cuerpo de Bela sintió un espasmo ante la voz tan monótona y firme de Francesca, sabía gracias a las cartas de madre Miranda que esa siempre era su voz así estuviera molesta o demasiado pomposa con alguien.

Su voz monótona y rostro neutral eran sus rasgos más característicos, aparte de ser alguien de acciones y pocas palabras junto a su mirada tan profunda y severa, su físico quedaba en segundo plano ante las primeras características.

Tomo valentía para alzar su mirada dorada a los ojos ónix tan imponentes de la más alta, podía notar la gran diferencia de alturas que tenían, Francesca le ganaba por 20 centímetros alcanzándola apenas a la altura de su barbilla.

Su rostro ovalado y delgado era hermosamente simétrico y delicado, su nariz perfilada y respingada la armonizaba perfectamente, sus pómulos fuertes y definidos eran igual de perfectos junto a sus labios carnosos pintados de rojo vino resaltándolos de su piel pálida y vestimenta blanca con plateado.

- Buenos días...- Se quedo callada al no saber con exactitud como llamarla

- Francesca, llámeme Francesca - Le pidió al saber porque su silencio- Tenemos que acostumbrarnos a llamarnos por nuestros nombres si conviviremos más seguido, ¿No cree, lady Bela?

- Claro, en todo caso debe llamarme por mi nombre - Le dijo más relajada

- Inaceptable - Negó con seriedad- ¿Será mi guía, lady Bela?

- Así es, madre no podrá hacerlo junto a mí así que yo lo haré - La empezó a guiar hacia la siguiente sala- De ante mano le pido perdón por la ausencia de mi madre, la administración del vino la mantiene ocupada

- Lo entiendo perfectamente - Asintió sabiendo como era Miranda con sus experimentos- No es fácil llevar todo un castillo bajo su control teniendo una gran responsabilidad con el vino

Bela asintió nerviosa ante su presencia siguiéndola, sus pasos firmes y seguros hacían que su presencia se volviera el doble de intensa. Podía sentir la mirada profunda de Francesca en ella en vez en cuando, de reojo observaba como la platinada miraba la decoración de los pasillos.

- Iniciaremos con la sala principal - Abrió dos grandes puertas marrones- Una doncella ya subió su equipaje a su aposento. Empecemos con el primer piso, no hay algún lugar restringido así que tiene toda la libertad de explorar el castillo