SIEMPRE FUISTE TÚ.

Capítulo 13. ¿Olvidaste mis gustos?

Al anochecer, la joven pareja seguía hablando, era como si las horas no hubieran pasado, permanecían en la misma posición conversando. Para la escritora, era complicado tratar de explicar la historia de su nuevo libro, porque eso implicaba decir toda la verdad. Aunque Ho-Seok sabía una pequeña parte, no era fácil hablar sobre la versión completa.

— Sobre la historia — hizo una pequeña pauta, mientras pensaba cada palabra que diría — he avanzado bastante, si todo sale bien y aprueban la publicación, probablemente se hará público después de tu galería.

— Eso suena a que estarás muy ocupada estos días ¿Estas feliz por tu nuevo libro? — sus yemas rozaban la espalda de la joven.

— Si, es algo completamente diferente, cuando comienzo a escribir, es como si mis dedos no pudieran detenerse, todo fluye y me encanta.

Él fotógrafo detuvo sus caricias — Me alegra verte tan animada con este nuevo lanzamiento, pero ¿Ya lo platicaste con él? — La escritora levanto el mentón, dirigiendo la mirada al fotógrafo — ¿Ya lo sabe?

— ¿Eso que importa, por qué preguntas algo así? — se quitó del pecho del fotógrafo levantándose bruscamente, él se sentó en el sillón mientras la observaba.

— No quería incomodarte, pero por lo que se, estas escribiendo sobre la vida personal de ambos, así que por lo menos debe de estar enterado — Tomó la mano de la joven, quien lo miraba desconcertada — Discúlpame, tienes razón al molestarte, yo no sé nada sobre libros ¿podrías perdonarme? No quiero que estés enojada conmigo.

Te sentaste a un lado de él, mientras exhalabas profundamente. Él fotógrafo tenía razón, aunque era muy lógico, no lo habías pensado. Sabías que Jung-Kook no haría nada contra ti, pero su empresa si, no podías desprestigiar la imagen de un famoso, todo el mundo se iría en tu contra. Sin mencionar los problemas legales. Eso te desmotivo demasiado, fue un golpe de realidad.

— Disculpa, no quise reaccionar así — sonreíste levemente — ¿Debería dejar de escribirlo?

— No, él no necesita autorizarlo, solo debes mencionárselo — se sentó frente a la joven mientras tomaba sus manos — Mi-Suk, esta historia también es tuya, tienes todo el derecho a publicarla, nadie tiene porque saber que ustedes son los personajes principales ¿o sí?

— Lo sé, pero aún así no deja de ser riesgoso, no quiero perjudicarlo — cubrió su rostro, pero inmediatamente él fotógrafo tomo ambas manos y las beso dulcemente.

— Mi sol, hace un rato estabas muy emocionada por esto y quiero seguir viéndote así — coloco sus manos en tus mejillas — Eres maravillosa, estas escribiendo un libro sobre un tema que es muy difícil para ti poder hablarlo. Hazlo con miedo, pero hazlo, te lo debes.

— Gracias por darme valor — lo abrazaste fuertemente — De verdad gracias — él fotógrafo correspondió al abrazo. Él timbre de la casa comenzó a sonar, rompiendo el momento entre ustedes.

Él fotógrafo camino hacia la puerta y abrió — ¿Por qué carajos no contestas mis llamadas? — él hombre de cabello cobrizo entro, arrastrando bolsas enormes y pesadas. Ho-Seok trato de detenerlo, pero la escritora se encontró con yoongi en el pasillo.

— Hola Yoongi — hizo una ligera reverencia — Discúlpalo, dejo su teléfono en mi bolso y no lo he sacado de su auto.

Yoon se sintió avergonzado al ver a Mi-Suk, hizo reverencia — Lo siento, no sabía que estabas aquí, no quise interrumpirlos.

— Descuida, ya debo irme, los dejare para que trabajen cómodamente.

Él fotógrafo se acercó a ti — Te llevare a casa, solo dame un momento.