Hydrophobia - Fargexby AU

CAPÍTULO 15: "Búsqueda de un nuevo hogar"

"Cuando cierro los ojos escucho las olas del mar.

Ahora las tengo aquí frente a mí, pero tengo la certeza de que allá donde vaya, las seguiré escuchando, porque ese sonido me recuerda a tu sonrisa".

Llevaban varios días planeándolo. Fargan incluso se había tomado la molestia de hablar con distintas agencias y revisar algunos pisos online, pero hoy, por fin irían a ver los que más les habían llamado la atención.

Lo más importante para ellos es que los habían elegido juntos, así que les hacía ilusión poder ir a verlos en persona.

Tras prepararse incluso unos bocadillos para comer fuera de casa, ambos salieron emocionados, y se subieron al todoterreno gris del moreno.

-Por fin hoy vamos a verlas...-suspiró nervioso-Espero que podamos encontrar una buena-miró de rojo a Alex, pero notó que este no le escuchaba. Estaba demasiado emocionado, no había visto el proceso de búsqueda de un hogar en los humanos, parecía impaciente por aprender algo nuevo.

Pasaron el día de casa en casa, admirando cada detalle con minuciosidad.

Tras pensarlo un poco, Fargan decidió que descartaría los pisos, Alex parecía feliz de ver la calle desde las alturas, pero era cierto que no eran lo más apropiado para él. Eso por no decir que la mayoría se encontraban en el centro, que estaba abarrotado de gente y, por si fuera poco, corrían el riesgo de que por accidente algún vecino de un edificio cercano viese la cola de Alex a través de una ventana.

No, no podía ser.

Se alegraba de haber ido a ver las casas en compañía de Alex, podía ver su propio interés en cada una, descubrir lo que le llamaba la atención y lo que no, y también él podía advertir con mayor facilidad los problemas de cada vivienda para el joven tritón.

Las casas eran descartadas una tras otra, y Fargan comenzaba a pensar que no encontrarían una ideal.

Las últimas del día eran aquellas que más se salían de su presupuesto, así que no tenía demasiadas expectativas.

Se adentraron en aquel chalet de playa. Recordaba las fotos vagamente, la casa tenía tres pisos contando el sótano.

Tenía puerta de garaje en el vallado del jardín y una más pequeña para pasar las personas. Había un pequeño camino empedrado hasta la puerta de la casa, pero mientras caminaban hacia ella, los ojos del moreno se desviaron hacia el ocaso, que iluminaba el horizonte con el mismísimo color del fuego.

Era una vista preciosa. El sol se posaba sobre el mar, dispersándose en millares de reflejos que se extendían sobre la superficie como las mas exquisitas joyas de la naturaleza.

Bajó la vista.

Había una pequeña cala de blanca arena rodeada por altos muros naturales formados por enormes rocas.

-¡Oh! Sí, este es uno de los atractivos de esta casa, la playa privada añade bastante valor-sí... ya lo había pensado cuando leyó la descripción del chalet en la web, pero ahora que estaba allí, no le parecía que fuese un valor inmerecido.

El de la inmobiliaria siguió hablando a medida que avanzaban por el camino y se adentraban en la casa, pero Fargan ya estaba seriamente pensativo. Una playa... era lo más conveniente, pese a saber que no tenía dinero para pagarlo.

El interior era espacioso y muy luminoso, tenía grandes ventanales, pero al ser un recinto privado, incluso así gozaba de la mayor privacidad.

Visitaron el piso inferior, y luego el superior. Las habitaciones eran grandes.