~Caricia XXI~

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- Deku~- Gruño en el oído del menor lamiéndolo en el proceso provocando que Izuku soltara un gemido agudo por la intromisión de algo húmedo en so oído, Bakugo seguía embistiendo de manera dura rozando con la próstata del peliverde, pero tapando la uretra del peliverde sin dejarlo correrse.

- ¡Ahí Kacchan!~- Gritaba el peliverde de manera desenfrenada dejándose las cuerdas bocales, le encantaba ser torturado de manera placentera. 

La cama se movía de manera rápida contra la pared, los gemidos del peliverde rebotaban en las paredes del cuarto, las embestidas del rubio se hacían duras y rápida, en una danza de placer llevando al éxtasis al peliverde.

Bakugo al ver a su pequeño peliverde con los ojos en blanco por el placer, con la legua fuera de la boca con la saliva escurriendo por la mandíbula, con las lágrimas descendiendo por sus mejillas y gimiendo de manera loca sin controlar el volumen de la voz, sonrió de lado y se corrió de manera rápida ante la imagen erótica que el provocaba a la hora del sexo.

- K-kacchan.- Llamo el menor con voz rasposa por el esfuerzo de usar sus cuerdas bocales al hacerlo gemir como una estrella porno.- Me gustas.- Se confeso el peliverde mientras caía dormido en la cama dejando a un rubio cenizo sorprendido. 

Bakugo arropo al peliverde después de limpiarlo bien de los fluidos corporales y salió de la habitación de manera lenta sin hacer ruido pero se detuvo unos minutos mirando al de reojo al peliverde, al verlo dormir plácidamente salió sin hacer nada de ruido.

Los rayos de la luna iluminaban su mansión, los tonos blanquecinos se reflejaban en las cortinas, el suelo y las paredes, soltó un suspiro cansado y decidió llamar a su madre para adelantar la cena con ellos de esa noche para mañana por la mañana. 

- Vieja bruja la comida es mañana a las 14:00 de la tarde, no lleguen tarde.- Colgó la llamada dejando a su madre con la palabra en la boca, guardo su teléfono en su pantalón de manera pesada. 

Pudo ver entrar a Kirishima con un rubio dormido en sus brazos, se acercó a ellos de manera rápida pero sin hacer nada de ruido, le toco el hombro al pelirrojo quien dio un respingo en su lugar aguantando las ganas de sacar su arma, aferro el cuerpo del menor contra él y miro al rubio. 

- La cena con mi madre de hoy, será mañana por la mañana a la hora de comer, deja a ese idiota en tu cuarto y que no salga a cagarla, te lo pido por dios.- Informo el cenizo de manera relaja asustando un poco al pelirrojo.- Le presentare a la bruja a Deku como mi pareja.- Dijo el rubio de manera seria subiendo de nuevo a su cuarto más calmado tumbándose al lado del peliverde abrazándolo en el proceso.

Kirishima se sorprendió ante eso y siguió con su camino, abriendo la puerta de su habitación y acostando al rubio en su cama arropándolo en el proceso.

Se paso como 5 minutos contemplado como el rubio estaba dormido en su cama y muy relajado, sonrió de manera alegre.

- Tan lindo durmiendo.- Susurro el pelirrojo de manera baja mientras acariciaba los cabellos rubios, aprecio el hermoso rostro, sus cejar, pestañas y sus ojos se detuvieron en los rosados labios que se moria de ganas de probar.

Suspiro de manera lenta quitándose la ropa y acostándose al lado de Denki abrazándolo de manera protectora colocando la cara de este en su pecho.

...

Por otro lado, la banda de Tomura observaba desde la lejanía a la mansión de Bakugo con unos prismáticos y sonrió de manera macabra. 

- Mañana tendremos al hijo del traidor de Hisashi.- Se rio de manera macabra mientras se aleaban de allí y regresaban a su mansión pensando en un plan de como atraer al peliverde. 

- Tengo una idea.- Dijo Dabi de manera seria mientras miraba a su jefe.- La madre del peliverde está en el hospital en un coma inducido por culpa de nosotros al intentar matarla como venganza.- Dijo el moreno ganándose la mirada de su jefe con un brillo extraño.

- ¿Qué está pensando tu mente retorcida, Dabi?- Le dijo el mayor mientras caminaban de camino a su mansión, atravesando los callejones menos concurridos. 

- Le podemos decir que su madre esta grabe y cuando vaya al hospital lo secuestramos y lo tenemos como nuestro juguete sexual ¿no es buena idea?- Dijo Dabi con una pequeña sonrisa lasciva imaginando tener al peliverde a su merced mientras lo embestía de manera feroz.

- Es demasiado buena.-Le dijo el celeste mientras lo miraba de reojo y entraban en la mansión.- Prepara todo lo necesario para esta misión y dile a los demás que te ayuden con esto.- Ordeno Tomura mientras entraba a su habitación y cerraba la puerta.

Dabi sonrió de lado mientras caminaba hacia donde se encontraban los demás, entro a la sala y miro a cada uno de ellos. 

- Tenemos una misión para mañana.- Les informo el moreno mirando a cada uno y les empezó a decir el plan a cada uno y explicando las partes de como seria.

El personal atendian al plan que Dabi les explicaba y algunos aportaban ideas las cuales eran rechazadas al ser muy temerarias y podían ser descubiertos. 

- Toga, tu iras al hospital y te harás pasar por una enfermera y llamaran al chico para que vaya.- Le dijo el moreno mientras le extendía una bata de médico. 

- Twice, serás un doctor que le suministrara un sedante al mocoso.- Le dio el sedante.- No lo pierdas o si no se nos va a la mierda el plan.- Amenazo con voz seria y algo ronca. 

Siguió dando órdenes, indicaciones y los materiales necesarios a cada una de las personas que estaban en la sala, al terminal con la reunión cada persona abandono la sala caminando a las respectivas habitaciones, algunos ensañaban lo que tenían que hacer y otros se fueron a dormir por el cansancio de cada día.













































Caress SellerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora