La debilidad del Alpha

Episodio 27

POV HESTIA

Intente girarme lo más rápido posible pero Eros me agarro del brazo.

-¿Hestia?-volvió a preguntar sin poder creérselo aún.

-Véte- creí que tendría suficiente fuerza de voluntad como para entregarle a Kratos, pero en cuanto le mire a los ojos todo lo que ya creía que había superado volvió como una patada en el culo.

-¿Que?-no sé si estaba decepcionado o enfadado-Llevo meses buscándote pequeña-ignoro lo que le había dicho y me abrazo.

No pude resistirme y le devolví el abrazo, lo necesitaba.

-Eros no puedes estar conmigo-Eros me miro confundido pero no dejo de acariciar mis mejillas-Kratos te cogerá-algo en sus ojos cambio y se volvió oscuro.

-¿Él te ha hecho algo?- esa pregunta le salió algo temblorosa.

-No, estoy bien- Eros suspiro de alivio y me volvió a abrazar.

-Nos vamos- de verdad que quería hacerle caso pero no podía arriesgarme a que Kratos le hiciera algo por mi culpa.

-Te vas-me aparte de Eros y con toda la fuerza de voluntad que me quedaba me dirigí a la salida de emergencia.

Escuché algunos gritos de Eros pero no me paré.

Al salir de la discoteca el aire frío me golpeó de golpe y un pequeño escalofrío junto a un mal presentimiento se instalaron en mi sistema.

-¡Hestia!- me gire al escuchar su voz y de seguida fingí una sonrisa.

-Ya me iba a casa-Kratos miro a mi alrededor esperando encontrar a Eros supongo-¿Pasa algo?- fingí estar confundida y al ver que no había nadie Kratos también fingió una sonrisa.

-No, solo quería ver si estabas bien.

-Pues lo estoy, ya puedes irte-me gire para perderle de vista contra antes mejor, pero Kratos se interpuso en mi camino.

-Mejor te llevo yo a casa.

-No hace falta, se llegar sola-no me apetecía estar con él en el mismo coche.

-Insisto-la seriedad en su rostro indicaba que no era una petición.

-Está bien-Kratos empezó a caminar pero al girar la esquina se paró de golpe provocando que yo me chocara con su espalda.

Cogió su comunicador-Está aquí, disparad a matar-sabía a quien acababa de ver y solo escuchar que iban a matar a Eros algo que llevaba durante estos últimos 2 años reteniendo en mi interior se activó.

-No le tocaras ni un pelo a mi mate-Kratos se giró sorprendido por mis palabras pero no tardo ni dos segundos en sujetarme del cuello y presionarlo dejándome sin aire.

-Pensé que éramos amigos Hestia-le empecé a ver borroso por la falta de oxígeno pero Kratos no tenía intención de soltarme-Me decepcionas querida.

-Yo... jamas... -cogí aire como pude y con todas mis fuerzas le grite- ¡... seré tu puta amiga!-mi grito salió de mi interior como una onda expansiva y Kratos salió disparado hacia una pared.

Caí de rodillas al suelo recuperando el aliento y sorprendida de lo que acababa de hacer.

Al alzar la vista vi a un francotirador apuntando a Eros desde la azotea del edificio de en frente y al momento la adrenalina recorrió mi cuerpo.

Me levante rápidamente y sin pensármelo corrí hacia Eros.

-¡Eros!-al escuchar mi voz se giró bruscamente con su perfecta sonrisa iluminando su cara.