Hay gente con varias prioridades, algunos van al nivel de dar lo que sea por simplemente salir adelante.
Dream, Ink y Blue fueron 3 estudiantes que quedaron a la intemperie. Todo lo que tendrán que hacer, es sobrevivir. La pregunta sería, ¿a qué ni...
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Era un nuevo día, pero no por eso lo hacía mejor. Está de más decir que las protagonistas desearán que no hubieran nuevos días. Estaban siendo consumidas por el estrés, miedo y preocupación.
-Mierda...- Ink abrió los ojos. Era su alarma lo que arruinaba esa mañana...bueno no. En realidad varías cosas estaban arruinando su inicio del día. Genuinamente deseaba que fueran vacaciones o fin de semana. Lo último que quería lidiar, era la escuela.
La de café se encontraba recostada en el gran sillón de la sala, cuando apareció Dream. -Hora de levantarse, bella durmiente- Mencionó en un tono dulce mientras caminaba hacia la cocina. -Hablas como si fuera el mejor día de tu vida- Contestó Ink amargada mientras tomaba asiento en el sillón. Era suertuda de ser chaparra pues al menos entraba en ese sillón.
Dream río un poco. -Oh Ink...es todo menos el mejor- Contestó sarcástica mientras hacía un pan tostado. No era mucho para su desayuno pero no se podía dar el lujo de comer algo más. -Lo que sí sé es que mientras más rápido empecemos, más rápido termina el día- Agregó para empezar a comer.
Si ya de por si perdían la cabeza con el estrés académico, era mortal ahora incluir situaciones legales. Literalmente estaban siendo parte de una red de trata de blancas. Si bien ellas en realidad eran las víctimas, eso no quitaba el hecho que ellas decidieron por su cuenta ingresar a este mundo. En sus mentes, ellas eran unas grandes criminales.
Lo único que les confortaba, era saber que se tenían una para la otra. Sabían que cada una cuidaba la espalda de la otra. De no haber sido eso, este mundo se las tragaría vivas. No solo en ese club ilegal, sino también en la vida institucional.
Blue apareció de la nada y le robó el pan tostado a la amarilla, partiéndolo a la mitad. Algo que definitivamente molestó a la mencionada. -¡Hey! Consíguete tu pan- Quejó muy hambrienta. -Hablas como si tuviéramos dinero para pagar más despensa- Contestó despreocupada Blue mientras daba mordiscos a la otra mitad del pan. -Chicas, malas noticias. No habrá merienda, no queda dinero ni despensa para todo el mes. Tendremos que ahorrar y partir porciones- Las dos restantes gruñeron pues pensar en que habrá días que no comerán una merienda normal las mataba. De verdad el hambre las consumía.
Ink volvió a tirarse en el sillón. -¿Ni un poco?- Blue negó. -Mierda, la paga de la escuela es en como 2 semanas más- Esta suspiró preocupada. -A este ritmo, ni nos dará para pagarlo- Comentó pasando sus manos por su todo su rostro. Necesitaba masticar todos estos detalles.
Eso no quitaba el hecho que aún no contaban con el dinero de pagar la deuda escolar y se asomaba a la esquina. Sería su primer mes sin pagar completamente sus estudios. A duras penas sus monedas aguantaban para obtener la despensa. Vaya que alimentar tres bocas era todo un problema.
