Ready For Love (JENLISA)

Final

Habían transcurrido quince días, finalmente Jennie asistió a la corte para escuchar el veredicto quién falló a su favor, no obstante se encontraron más pruebas en contra de Jong-In como el hecho de que padecía un transtorno psiquiátrico desde muy joven y que fue tratado adecuadamente hasta llegar a la adultez. También encontraron pruebas en las cuales demostraban su participación en otros delitos como suministros de productos alucinógenos entre otros. Tal vez la condena hubiera sido corta si su comportamiento dentro de la corte no fuese tan agresiva justo cuando el fiscal le hacía unas preguntas.

—Acusado, ¿estaba usted consciente del embarazo de Jennie Kim?

—Sí —respondió escuetamente.

—¿Cuáles fueron los motivos que lo llevaron a arremeter contra la vida de la Sra. Kim en su estado prenatal?

El cuerpo de Jong-In se tensó apretando fuertemente sus puños, su mandíbula se endureció.

—¿Quería matarla por alguna razón?—continuó el fiscal.

—Objeción, su señoría, el fiscal está presionando a mi cliente.

—Objeción denegada a lugar. Acusado, responda la pregunta.

El Rostro de Jong-In se torno rojo entrando en cólera y se levantó de golpe señalando a Jennie con el dedo índice alzando la voz inminentemente.

—¡ELLA ME ROBÓ A LISA! Yo estaba intentándolo y todo mi esfuerzo fue en vano a hasta que ella apareció. ¿ Quiere saber por qué quería exterminarla como la plaga que es? Porque cuando le pregunté a Lisa qué rayos tenía Jennie que yo no tenía, ¿sabe qué me respondió? VAGINA, solo porque no tengo una maldita VAGINA. ¿Comprende eso? —Gritó Jong-In muy alterado, haciendo que todos los presentes en la sala comenzaran a murmurar.

El sonido ensordecedor del mazo de Juez hizo que todos los presente guardaran silencio.

—Fiscal, ¿tiene más preguntas?

—No, su señoría.

Jennie y Lisa habían decidido que luego de la sentencia se irían a vivir a Corea, al menos por un tiempo querían emprender otro rumbo por el bienestar de la familia que habían hecho juntas. Además de que en los planes de ambas estaba el criar a su hija en un ambiente lleno de confort, querían estar en paz y con tranquilidad.

ACTUALIDAD

Jennie salía de una librería, el día era un poco soleado, por lo que optó por colocar sus gafas de sol, y miraba hacia a los lados tratando de divisar a Lisa, quien había dicho que pasaría por ella para ir las tres hacía el parque. Miraba  su móvil para marcar la tecla rápida y llamar a su esposa cuando frente a ella una camioneta se detuvo y una voz la Interrumpió.

—Hola, guapa, ¿vas a algún lado?

—¿Perdón? —respondió Jennie alzando una ceja y guardando su móvil en el bolsillo de su abrigo.

—Te pregunté que si vas a algún lado. Es que venía del carril contrario, te vi aquí sola con cara de esperar a alguien y me acerqué.

—¿Nos conocemos? Hmmmm... Creo que no. Además no salgo con personas desconocidas, así que gracias por la oferta —respondió educadamente.

—Tienes razón, somos desconocidas, pero podemos conocernos. Cerca de aquí hay una cafetería, podríamos ir si deseas.

—No puedo, soy casada y además estoy esperando a mi esposa —dijo Jennie a punto de entrar en cólera, mostrando su anillo de bodas que estaba en su anular izquierdo.

—Oh, bueno, si es por eso...

No logró terminar porque una voz la interrumpió.

—Mami... ¡Al fin vamos al parque! —gritó la pequeña Saeki emocionada, soltándose de los brazos de la cuidadora de la mini guardería que estaba anexada a la librería, corriendo hacia la puerta que estaba abierta para acomodarse al lado se su mamá.