Embarrassment || MINSUNG

Capítulo 33

Jeongin actuaba extraño. Hyunjin no entendía el porqué. Suponía que estaba cansado debido a las enormes exigencias del club de basquetbol, así que decidió no preocuparse mucho al respecto, sin embargo, Jeongin cada vez lo evitaba más y su extraño comportamiento, solo fue en aumento.

Quería averiguar la causa, pero estaba tan ocupado en cosas que nada tenían que ver con él, que se le olvidaba. En ese momento, se había decidido en ir a buscar a Jeongin y cuestionarlo. Quizás estaba deprimido por algo y él debía estar ahí para apoyarlo.

Estaba preparando sus cosas, cuando el timbre de su casa fue tocado repetidamente. Abrió la puerta de golpe, encontrándose con Jisung, observándole con enojo.

—Hola, ¿ya te cansaste de visitar burdeles con Minho y por eso viniste a verme?

—¿Le has estado contando cosas raras a Seungmin? —omitió el saludo, yendo directo al grano.

—¿De qué hablas? -le preguntó, frunciendo el entrecejo.

—No te hagas el inocente —dijo secamente.

Hyunjin de inmediato se puso a la defensiva.

—¿Y qué si lo hice?

—¿Cómo te atreves?

—¿Disculpa? ¿Por qué te molesta tanto, tienes algo que ocultar?

—No. Y si lo tuviera ese no es problema tuyo. No tengo que contarte absolutamente todo lo que pasa en mi vida y tú no tienes porque ser tan entrometido.

—Oh, ya veo. Lo que te molesta es que le haya dicho a TÚ NOVIO que te la pasas viéndote a escondidas con Minho. Los dos se la pasan haciendo quién sabe qué a espaldas de todos.

—¿Qué tiene eso de malo? ¿Te consta que estemos haciendo algo malo? —respiró, no quería explotar, no aún—. ¿Qué me veo a escondidas con él? La única vez que hemos salido juntos fue la vez del centro comercial, y eso Seungmin lo sabía y no le había molestado hasta que tú fuiste y le llenaste el cerebro de mierda. ¡No sé por qué debo aclararle esto a todo el mundo!

—¿Hasta cuándo dejarás de hacerte imbécil?

—¡Deja de insinuar cosas!

—¡¿Olvidas aquella vez que dormiste en mi casa?! ¡¿Cuándo saliste descalzo en medio de la noche en plena tormenta?! Obvio que me di cuenta, cuando salí con un paraguas a ver si estabas bien, tú ya habías corrido metros como un demente. Te seguí, pero al parecer no te diste cuenta. Ahí te ví con Minho. Entonces regresé a la casa y decidí esperar. Para cuándo llegaste, incluso llevabas una ropa distinta, solo que volviste a ponerte la otra para que yo no sospechara nada. Decidí no ser un entrometido de mierda, de lo que siempre me acusas y decidí esperar a que estuvieras listo para decirme, pero tú, te escondiste como una sabandija que sabe que está haciendo algo cuestionable.

—Bien. Pues ahora, las cosas están arruinadas con Seungmin, en parte es por tu culpa.

—Puff —resopló—. Vamos, a quién engañas. La última vez que me encontré con ustedes en la plaza se veían demasiado felices.

—¡¿Y eso qué tiene de malo?! ¡No por eso debes insinuarle a mi novio que lo estoy engañando! ¡Eres como una maldita víbora! —alzó la voz, cada vez más exaltado.

—¡Sí no estaban haciendo nada malo, entonces por qué lo ocultabas!

Jisung no supo qué responder. Estaba rojo de ira y tenía las manos cerradas en puños, sus nudillos estaban casi blancos de la presión que ejercía.

—Eres un maldito hipócrita de mierda Han Jisung. Sé que quizás no debí entrometerme tanto, pero me molesta que después de todo lo que sufriste por él, todo lo que lloraste y te quejaste y lo maldijiste sin parar, en cuanto regresa, estés como si nada hubiera pasado. ¿Soy un mal amigo por preocuparme por ustedes? —se frotó la cara con desesperación—. Te olvidas que Seungmin también es mi amigo. Así que, Han, si ya no lo quieres y en cambio babeas ahora por el pene de Minho, entonces sé honesto con él, porque no es justo que estés jugando con los sentimientos de ambos de esa manera.