Embarrassment || MINSUNG

Capítulo 24

El fuerte sonido de la lluvia lo despertó, pero se rehusaba a levantarse, así que fingía estar dormido mientras Seungmin lo observaba. Era un hábito que el castaño siempre hacía y a Jisung no le molestaba.

Aun no podía creer que aquel chico tímido que conoció en el taller de música durante la escuela media, aquel chico con el que con trabajo y cruzaba unas cuatro frases a la semana, terminaría despertando junto a él casi todas las mañanas.

—Se que estás despierto. Levántate, flojo. —Lo regañó mientras extendía la mano para apartar los mechones de su cara.

Jisung se dejó ser, sintiéndose adormilado ante las caricias de Seungmin.

—¿Ya tienes que irte? —le preguntó.

—Sí, tengo clase a las diez... —Respondió Seungmin sin dejar de acariciar su rostro.

—Pues yo no tengo clase hasta mediodía, así  que compermiso, procederé a seguir durmiendo —espetó Jisung, dándole la espalda y cubriéndose con la manta.

Seungmin rió y apartó las cobijas de un tirón, dejando el pequeño cuerpo de Jisung al descubierto.
Jisung comenzó a retorcerse de frío, y la lluvia azotaba más fuerte las ventanas.

—¡Oye! —le reclamó, dándole patadas e intentando arrebatarle la cobija.

—Levántate, te conozco. Si no te llevo a la facultad te quedarás durmiendo y llegarás tarde. ¿Cuántos retardos has tenido este mes?

Jisung suspiró y se levantó adormilado y con los cabellos desordenados.

Seungmin pasó por su lado revolviendo sus cabellos y empujándolo hasta la ducha.

Era la única persona que lo podía obligar a bañarse, y eso no era algo muy bueno que digamos.

[...]

Cuando salieron, la lluvia había cesado un poco, pero la mañana estaba nublada y gris, con una bruma densa que impedía ver con claridad.

—¿Puedo conducir esta vez? —preguntó Jisung, poniendo una de sus mejores caras tiernas, ya que el castaño era muy "especial" a la hora de prestar su coche.

—¿Me darás una garantía por escrito de que no estrellarás mi auto?

—No.

—Bueno me convenciste, toma las llaves.

Jisung subió emocionado al asiento del conductor y comenzó a moverle al estéreo, poniendo un par de canciones tranquilas que quedaran acorde con el melancólico clima.

El trayecto hasta la universidad fue tranquilo y sin ningún contratiempo.

Bajaron del vehículo con paraguas en mano a pesar de que la lluvia ya había cesado por completo, y el sol no parecía querer ni asomarse por entre las nubes.

Comenzaron a caminar tranquilamente, únicamente acompañados por el ruido de sus pisadas al hacer contacto con el húmedo asfalto.

Jisung lo esperó fuera de la cafetería y Seungmin le entregó un vaso humeante de café recién hecho. Jisung sostuvo el vaso de cartón entre sus manos para intentar calentarlas.

Caminaron alrededor de todo el campus, intentando esquivar los enormes charcos de agua.

En una de esas, Seungmin tomó su mano de improviso, para evitar que se cayera.  Siguieron caminando aún tomados de la mano y Jisung comenzó a sentirse nervioso, con una especie de inexplicable paranoia. Volteaba hacia todos lados, como si temiera que alguien los viera, pero no era así en lo absoluto, entonces no comprendía el porqué se sentía así.