CAFÉ ―Pablo Gavi, Charles Leclerc

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OMNISCIENTE.
(El cumpleaños)

Violeta miraba a la chica, recién habían estado hablando de lo que Pablo le había dicho. Ella no creía a su primo capaz de aquello, por lo que supuso estaba tramando algo.

Salió de la panadería y camino hasta el otro lado de la calle, ahí se hayaba su domicilio por lo que corrió hasta su habitación y llamo a su primo.

---¿Tan temprano estás despierta? ---hablo el piloto un poco despistado.

---Son las 9:00 Charly ---respondio con seriedad la chica---He estado hablando con Ana y me ha dicho que Pablo le contó que estuviste con una chica en casa de alguien llamado Tomás.

---Mierda ---respondio el piloto, parecía que ya estaba más despierto---Sobre eso también quería hablar contigo, no estuve con nadie... Bueno si pero no de la forma que ella se imagina.

---¿De que forma entonces? ---pregunto la adulta con burla.

---Estamos planeando algo, algo en lo que tú me vas a ayudar también ---dijo rápido antes de que ella lo mal interpretará---Fue con Mariana, pero ella es mi amiga y me ayudara a hacer algo por su cumpleaños.

---¿Su cumpleaños?

---Si, su cumpleaños.

Y entonces recordó que Ana cumplía 21 el próximo sábado, que estúpida se sentía hoy.

---Oh, tienes que darte prisa porque no creo que ella te quiera ver ahora ---dijo la pelirroja mientras reía como loca---Esta celosa...

---¿Celosa dices?

---Le gustas Charly, es evidente

---¿Tu crees?

---Estoy segura ---respondio sin dejar de reír, la situación se le hacía graciosa.

---Pero es que justo ahora no puedo ir, tengo que pasar por naranjita al veterinario porque está enfermo.

---¿Quien es naranjita?

---Naranjita es el gato que nos hayamos el otro día, esta enfermó y quedé de pasar por el hoy.

Violeta suspiro---Bien Charly, no sé cómo harás para hablarle ahora a Ana, ella no te quiere ni ver.

ANASTASIA GÓMEZ.
(Una semana después)

Quería estar segura de mi misma, estar segura del que Charles había tomado tal decisión para así yo también poder seguir adelante.

Me era bastante difícil el poder concentrarme, tomando en cuenta el que tenía mi cabeza hecha un lío, Violeta había estado ayudándome pero tuvo que irse a recojer unas cosas que necesitaríamos para un encargo.

Había estado haciendo algunos panecillos que hacían falta en la panadería por lo que no había tenido tiempo de si quiera pensar en Charles, lo había estado evitando últimamente y eso me tenía menos preocupada.

La señora Belle entro a la cocina dejando una caja a mi lado, ella me indicó con una sonrisa la puerta por lo que desconcertada miré.