El médico se encontraba revisando al adolescente que parecía no haber mejorado en nada, en realidad, sólo había empeorado. Sus ojeras resaltaban más al igual que los huesos de su rostro, costillas y brazos. Parecía un cadáver, uno realmente en estado deplorable. Min Yoongi ya no sabía qué hacer, los medicamentos no parecían tener efecto en él, tampoco lograba averiguar cómo se transmitía la enfermedad, y para variar, ya habían llegado otros tres casos.
—¿Cómo va doctor? —preguntó la madre preocupada, aguantando las lágrimas en sus ojos.
Min Yoongi soltó un sonoro suspiro mientras se alejaba de Jungkook que estaba profundamente dormido, sus labios partidos color violeta le daban un aspecto terrible.
—No está mejorando. —habló con la verdad viendo a la madre con tristeza.
La señora Monoban tapó su boca y ahogó un sollozo, negando con la cabeza y cerrando sus ojos. Se dejó caer en el sofá sollozando, repitiendo una y otra vez que no podía ser posible.
—Deberé tratar los demás casos, interrogar —el doctor se acercó suavemente a ella sobando su rodilla—. Trataré de averiguar si hay alguna cosa en común, cómo se contagian, debe haber una respuesta —la madre lo observó con ojos rojizos—. Haré todo lo que está en mis manos, se lo prometo.
La mujer asintió y observó de nuevo a su hijo. Yoongi suspiró de nuevo y cogió su maletín para salir del lugar, no sin antes observar detrás de él y alzar una ceja al ver una cruz colgada en la pared... pero estaba invertida.
—¿Señora Monoban? —llamó el doctor.
—¿Sí doctor? —preguntó ella viéndolo con tristeza.
—La cruz... creo que está... —se frenó.
La señora Monoban volteó y abrió sus ojos sorprendida. Se levantó rápidamente de la silla y la colocó correctamente murmullando algo que el doctor no alcanzó a escuchar. Yoongi negó con la cabeza y finalmente salió del lugar con el reloj a mano para verificar la hora.
—Tengo tiempo... —susurró en voz baja antes de dirigirse a la biblioteca pública.
Ingresó en silencio, inclinándose formalmente frente a la vieja recepcionista que devolvió el gesto. Avanzó por las hileras de libros, colocando su índice rozando los costados para leer los títulos. Al encontrar finalmente los de medicina, los comenzó a sacar uno por uno para leerlos cuidadosamente, ver si encontraba algo, lo que sea.
Se sentó en una mesa alejada de las demás y comenzó a hojear los libros. Buscó enfermedades de la piel, de la sangre, órganos internos. Estuvo toda la tarde metido en aquella biblioteca para buscar patrones y si algo se parecía con lo que estaba viendo, cosa que comenzaba a preocuparlo. Había recibido una carta de su sede, habían analizado la muestra del vómito extraño y los resultados fueron increíblemente confusos.
Era cierto que el vómito con sangre era un síntoma de hematemesis, lo cual eso significaba una lesión en el aparato digestivo. Jungkook pudo ser enviado para que le hicieran análisis y supieran exactamente por qué estaba lesionado, ¿Disfunciones vasculares? ¿Erosión de la mucosa? ¿Gastritis? ¿Tabaquismo? ¿Tumores en el esófago o estómago? Las posibilidades eran infinitas.
Sin embargo, no lo hicieron. ¿Por qué? Porque encontraron muestras de algo que no debería estar: hierro con sulfato de magnesio, alias, acero.
¿Por qué un joven tendría acero en el estómago? ¿Qué acaso consumió algo de metal? Lo recordaría en ese caso. Pudo envenenarse y eso mostraría la fiebre, la palidez y la sangre debido a un desgarre en el intestino o estómago. Era la única explicación lógica.
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LEVIATHAN - yoonmin
Fiksi Penggemar❝ Donde Park Jimin era un satánico, producto del mal y príncipe del infierno... y Min Yoongi un ateo y anhelo más grande del hijo del Diablo.❞