15. Nos descontrolamos solo un poco

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Nico

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Nico

—Te ves bien —me aseguró Frank.

—¿Tú crees? —pregunté. Admito que estaba un poco nervioso.

—Claro que sí. En serio, estás genial.

—Gracias.

—¡Mira que son tardonas! —exclamó Leo.

—Que tú no tengas paciencia no es nuestro problema —le contestó Jason—. Mira, ahí están.

Hazel, Annabeth, Thalia, Piper y Mary llegaron hasta nosotros. Las tres llevaban vestidos de fiesta. Él de mi hermana era violeta, Annabeth iba de un gris plateado, Thalia iba de negro, Piper llevaba un vestido fucsia y Mary lucía un ajustado vestido de un verde agua.

—¡Vivan los viernes! —exclamó Piper—. Y ahora, larguémonos antes de que Reyna nos dé el sermón de madre.

Thalia rio y tiró de su hermano. Todos nos juntamos en un grupo numeroso. Leo saltó a la espalda de Piper riendo. Mary agarró a Percy por el brazo y lo arrastró hacia la salida del campamento.

Realmente, Mary no quería meterse en mucho barullo. Solo fuimos a un bar bastante grande y pedimos algunos cócteles. Nos sentamos en una gran mesa. Mary estaba a mi lado. Me permití el rodear sus hombros con mi brazo en público.

—Y me han llamado hace una hora —anunció mi novia de repente.

—¿Qué? —la miré.

—¡Oh, por los dioses! —exclamó Annabeth—. ¿Qué te dijeron?

—Quieren que haga un disco con las canciones más famosas del universo de Disney. ¡Será flipante! Van a caracterizarme de las princesas Disney. ¡Cantaré las canciones de Mérida! Considero que Brave tiene las mejores canciones de Disney en cuanto a princesas.

—¡Qué fuerte! —exclamó Leo.

—Felicidades, Álex —dijo Frank.

—¿Dónde... dónde lo vas a grabar? —pregunté, aterrado por la respuesta.

Ella se mordió el labio y sonrió.

—¡En Los Ángeles!

La abracé de inmediato.

—¡Sí! —exclamé.

¡Se quedaría! ¡Estaría cerca! ¡La podré ver!

—Iré por otra ronda para celebrar—sonrió Jason—. Álex, ¿empiezas con el alcohol o qué?

—No, gracias —negó—. La verdad es que me duele un poco la cabeza desde esta mañana y no lo quiero empeorar. Además, alguien tendrá que guiar a todos los borrachos al campamento.

El eco de las sombras || Nico di Angelo (libro 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora