Capítulo 4

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Cheng acomodaba a la pequeña en la cama, le dio su peluche de tigre y le dio un besito en la frente.

Busco en su librero, toma uno de los libros sobre crianza de perros, ese fue uno de los primeros regalos que Wen RuoXi le hizo por su cumpleaños, sin poner la atención en el mismo lo leyó hasta escuchar el ronquido de Wen YueLiang.

Cheng fue al sillón, siguió ojeando el contenido del libro, pronto bosteza, lo deja en su pecho y miro el techo por un largo tiempo.

El sueño pesa, sus pestañeos son más lentos.

—Sandu — de su boca salió ese nombre y miró su espada Xiwang, dos recuerdos muy pesados se entrecruzan.

Sandu (recuerdo)

—¡¡¡Sijie!!!¡¡A-Cheng!!! Miren —un niño de sonrisa enorme llegaba jugando con un estuche de espada a una mano y en la otra la espada —me la han dado. Es mía, mi espada.

Sus ojos estaban llenos de alegría y pasión por usarla.

—A-Xian no la agites con tanto descuido, lastimarse a alguien —una niña tan hermosa como un hada tomaba la espada y la guardaba con tranquilidad —¿cuál es su nombre?

—Mmm...¿debo ponerle nombre?

—¿No es obvio? Debes ponerle un nombre tonto —esa voz ¿quién es? ¿quién es?¡oh! Es él y esta con un rostro muy renegado. También parece apretar sus manos con cierto celos —¿cómo pueden darle a un tonto una espada?

—A-Cheng recuerda lo que hablamos, debes ser bueno con A-Xian —la niña es muy dulce, muy buena como para no estar envidiosa y envenenadas con la idea de arrebatar esa hermosa espada como él —debes apoyarlo y alegrarte por él.

—Si Sijie —parecía triste por el regaño, ¿acaso este mal que este envidioso? —¿Cuándo tendré la mía?

—Algún día. Pero A-Cheng, hoy es el día especial de A-Xian, felicitalo.

—Me alegro mucho por ti Wei Ying...

Cheng comenzó a recordar que su madre le reprendió por no ser lo suficientemente talentoso como para obtener una espada como él pelinegro favorito de su padre, a la vez una gran pelea hizo que Femiang y Yu Ziyuan parezcan fieras peligrosas que le hacían tener mucho miedo y más cuando ese peligroso anillo de la mujer chispea tanto. Sólo quiere que su padre ponga una mano en su cabeza y le diga bien hecho, toma, tu espada. Pero las cosas no pueden ser así, Ziyuan a pesar de sólo ser la señora del muelle más no el líder en sí, camino molesta a la forja de armas dentro del clan y tomará la que se forjó poca él desde que nació. Y se la entregará con una "tomarlo y asegúrate de ser el mejor con ella".

Vamos, esa espada es muy pesada para su pequeño cuerpo a diferencia a las armas de madera que usa para practicar como los demás a su edad. Sus ojos eran ilusionados hasta que noto la boca torcida en molestia y desaprobación de su padre y los ojos de preocupación de su querida hermana.

Nadie quería que tome esa espada, entonces ¿Por qué se la dieron?

—A-Cheng —el niño del otro día llegó con su espada bien encajada en su ropa —a mí me gusta Sandu, es una espada muy bonita.

—¿Te gusta? Entonces ¡quedatela! —la lanzó a los pies del otro que la tomó, pero para devolverla a las manos de su dueño —¿qué haces?

—Sandu es tuya, no creo hay alguien mejor que tú para portarla. Sólo debes ser más alto y verás que ella se verá muy bien y tío Femiang dirá "¡oh! Eres tan talentoso".

Sandu es su querida espada, misma que no supo como nombrarla hasta que su madre le sugirió el nombre, más que sugerirle, le dijo que debía nombrarlo así para seguir con una tradición de Meishan Yu. Así fue, su primera arma y responsabilidad. Pero recordar eso duele. Ese niño que ahora es Wei WuXian hablaba de corazón. Pero, ¿Hasta qué punto su padre aceptaría o creería que él es suficiente para ser amo y señor de Lotus Pier? Se respondió a sí mismo con un "quizás nunca".

MANO CALIDA (TERMINADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora