Freya se encontraba mirando su reflejo, muy lejos, pero muy lejos del lugar en donde había ocurrido la pelea con yoshiro, sus ojos estaban húmedos y rojos, había llorado desde que había acabado aquella pelea.. como ella pensaba ellos eran "amigos" hasta donde entenia entendido, pero al parecer se había equivocado. Su nariz humeante y ojos llorosos hacían verla muy abatida.. "otra vez freya, otra vez" se dijo a si misma al recordar todas las malas amistades que había logrado tener a lo largo de su corta vida por así decirlo.
La felina suspiro y siguió mirando su reflejo.. no se sentía bien como para hacer otra cosa, ella y yoshiro solían pelear mucho pero por idioteces la mayoría de veces y siempre la pasaban muy bien juntos. Bromeando o haciendo cualquier cosa
- ¿que hace una felina tan linda sola por estás zonas? - escuchó. Freya miro hacia atrás y noto la presencia de un cheetah como ella. - ¿te rompieron el corazón? a veces los machos somos un poco estúpidos querida, pero no todos lo somos tanto como para romperle el corazón a una bella felina.
- ¿eh?..
El joven solo sonrió al ver la timidez, ingenuidad y confusión de la felina, suspiro antes de hablar — para acomodar sus pensamientos — Freya miraba con extrañesa al joven junto a ella, no había visto tantos guepardos en su vida.. y eso que aún era joven; su padre y madre solo los había visto una vez y había visto a otros guepardos por pura coincidencia.
- un gusto mi nombre es N'sue - se presentó y sento junto a Freya quien solo lo miraba confundida - me puedes decir "su" o "zú" como gustes, bienvenida a mi territorio espero que sea de tu agrado bella dama. - aclaro de forma cortés y cordial
Freya se sonrojo un poco, no solía recibir "bienvenidas" muy buenas que digamos.. la última "bienvenida" no fue del todo bienvenida.
N'sue como se llamaba, miro a Freya quien solo lo miraba apenada y trataba de limpiar lo más rápido posible sus lágrimas y tratar de verse lo menos mal posible.
- un gusto - respondió con voz nasal, lo que causó que se sonrojara aún más y tratara de aclarar su voz. - mi nombre es Freya, me puedes llamar.. "Frey" si gustas.
Aquella palabras hicieron que el felino sonriera, freya por otro lado solo sonrió un poco, debido a el acontecimiento pasado.. no sentía ganas de sonreír en lo absoluto, su mente estaba impestada de pensamientos sobre la pelea e imágenes de está misma.
- veo que eres tímida, eso es interesante - dijo - bien Frey.. se que nos conocimos hace unos segundos y que probablemente te preguntes "¿y este que quiere conmigo?" Pero te aseguro que puedo ayudarte con cualquier problema, amoroso, psicólogico o incluso de la otra clase.. aún que eso no importa ahora - aseguro mirando fijamente a los ojos a la felina. - me puedes contar tus problemas. Si gustas claro.