|𝙏𝙧𝙚𝙨 𝙋𝙚𝙧𝙧𝙖𝙨 𝙎𝙞𝙣 𝘾𝙤𝙧𝙧𝙚𝙖|

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Canción que queda de cierta forma con el final del capítulo

SAKURA HARUNO 

¿Por qué tenía que pasar esto? Veo que mis palabras se fueron a la mierda. Estaba confiada de que nada tan jodidamente malo nos podría pasar pero creo que estaba equivocada. 

Tal vez deba desear ser pobre para volverme millonaria. 

A la vida le gusta revertir mis planes... 

Justo ahora los tres nos encontramos sentados en el suelo de una calle insólita de alguna parte de la ciudad simplemente viéndonos las caras como idiotas, asimilando todo lo que acaba de pasar en menos de un día. Mi vestido está roto y sucio, no tengo zapatos y raspones por varias partes del cuerpo y ni hablar de mi cabello. 

Observo a Sasuke que está al frente mío y éste tiene la mirada perdida en el suelo. Perdió la chaqueta negra que traía puesta y solo tiene su camiseta blanca que ya no es tan blanca, esta desgarrada en varios sitios y manchada de suciedad al igual que su rostro. Sus pantalones son lo que tiene en mejor estado ya que su cabello está hecho un desastre. 

Pero aun así se sigue viendo guapo. 

Naruto por otro lado parece algo que el perro vomitó. 

También perdió la camisa que llevaba por encima y su camisa negra estaba rasgada en varios sitios, ah y le faltaba un zapato, su cabello parecía el cuerpo de un puercoespín. Sus ojos rojos debido a la llorada que se había pegado, al igual que su nariz y tenía mocos saliendo de ésta. 

Su cara gritaba: "Muerto en vida"

Miré mi mano derecha y observé el maletín mientras soltaba un suspiro. ¿Qué deberíamos hacer? 

Nos metí en esto y ahora no sé como responsabilizarme. Esto me pasa por hacerle caso a Ino y dejar que mi orgullo me controle... ¡Y por culpa del pinche gobierno puto que nos hace someternos a extensas pruebas académicas innecesarias! ¡Maldito examen! 

—¿Alguno tiene teléfono?— Pregunté sin muchos ánimos. —Dejé el mío en la cartera la cual quedó en el casino.

Al igual que mi dinero, identificación... gas pimienta. 

—El mío se perdió cuando nos secuestraron.— Dijo Sasuke. 

—Sorprendentemente, aquí tengo el mío.— Habló Naruto mientras lo sacaba de la bolsa de su pantalón. Los tres lo miramos y pusimos toda nuestra esperanza en ese Iphone11. 

Con eso ya tenemos un problema menos, podremos llamar a Ino y decirle donde estamos para que nos venga a recoger porque honestamente no tenemos ni puta idea de donde estamos. 

—Estamos salvados.— Dijo Naruto con alivió para luego darle un beso al teléfono. 

—Rápido, llama a Ino y mándale la ubicación.— Le dijo Sasuke, quien también se veía un tanto más tranquilo. 

Ufff, ahora si podremos irnos de aquí y continuar con nuestras vidas. Luego de esto, no volveré a tomar alcohol en lugares extraños, mucho menos en exceso. Que esto les sirva como lección de vida a ustedes que están leyendo esto. 

—Oigan... Me estoy meando.— Dijo Naruto mientras volteaba a vernos con una cara de sufrido. —Toma

Se levantó del suelo rápidamente y me aventó el celular, yo rápidamente lo atrape procurando que no se callera. 

—-¡Oye idiota, no tires tan despreocupadamente nuestra última esperanza!— Le grité. Dios santo. 

—¡Lo siento, solo llámala tú!— Decía mientras se alejaba sosteniendo su entrepierna con ambas manos. Se veía realmente urgido. —¡Si me orino encima la rubia no me dejara subir a ningún auto!