El Príncipe | Gay |

11

Noah había llamado a los padres de Prince avisando que se quedarían a dormir en su casa, para su suerte, estos no pusieron objeción.

—auch...—Prince se quejó sintiendo el algodón sobre su mejilla.

—perdón perdón.—se apresuró a decir Noah.—es inevitable que te duela, ese idiota se pasó...

—está loco, ni siquiera me dió tiempo de defenderme.

Jacob entró a la sala con un vaso de agua y una pastilla, se sentó al lado de Prince y se las tendió.

—tómala, es para el dolor.—pronunció suavemente, Noah se alejó un poco de Prince para que pudiera tomar la pastilla, Prince le sonrió débilmente y aceptó la pastilla tomándosela de un trago.

—gracias Jacob...—susurró.

—no te preocupes.—levantó la cabeza encontrándose con Noah, quien no separaba la mirada de ambos.—Noah, ve a descansar, yo terminaré de curar a Prince.

—¿seguro?

—si, no te preocupes.—ahí entendió que Jacob quería hablar a solas con Prince.

—bien, Prince, te espero en el cuarto ¿si?

El rubio solo asintió, Noah se levantó entregándole las cosas a Jacob y se fue subiendo las escaleras.

—no tienes que hacerlo...—murmuró el rubio mirando sus propias manos.

—no me molesta hacerlo.—tomó un algodón nuevo mojándolo en la solución salina y llevándolo a la mejilla del rubio, quien chilló una vez más del dolor.—lo siento.

—está bien.

Una vez sus heridas estuvieron curadas, Prince se acomodó en el sillón en posición de indio con la mirada en sus manos.

—Prince...

—lo siento mucho...—levantó la mirada viendo por primera vez a Jacob a la cara después del beso.—y-yo, me dejé llevar y...

—Prince.—tomó su mano tratando de tranquilizarlo.—está bien, no hiciste nada malo.

—te besé... y claramente no te gustó.

Jacob rió ligeramente colocando su mano en la mejilla del rubio haciendo que lo mirara.

—no es que... no me haya gustado, solo que... Prince, tengo pareja, y lo quiero mucho, lo lamento.—Prince asintió.

—p-pero, entonces si si te gustó... tal vez, solo tal vez, si no tuvieras novio, ¿me darías una oportunidad?—pronunció con una mueca triste, Jacob lo miró sin palabras.

—Prince...

—me gustas Jacob, y me has gustado desde que te conocí, solo esperaba el momento adecuado para dar el primer paso... pero tal vez fue demasiado tarde.—murmuró dolido.

Claro que Jacob sabía de los sentimientos de Prince hacia el, el menor no se esforzaba en esconderlos ni un poco, pero ¿cómo le decía que el también llegó a tener sentimientos por él cuando lo conoció? No podía decirle eso, no ahora, y tal vez mejor nunca.

—lo siento Prince, pero... no puedo corresponderte de la misma manera.

Prince lo miró sintiendo como sus ojos comenzaban a cristalizarse y un nudo se formaba en su garganta solo logró asentir.

—b-bien...—agachó la mirada de nuevo.

Después de un minuto completo de absoluto silencio, cuando Prince sintió que no podía aguantar un segundo más el llanto, se levantó y huyó rápidamente hacia el piso de arriba, Jacob lo miró irse con una expresión triste.