15. La Herida

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CAPITULO 15

-¿Cómo esta Blanchard?- le preguntó Peter en cuanto vio entrar en la enfermería a James, había llevado a Remus a la enfermería y este estaba dormido ya que siempre terminaba agotado después de luna llena.

-Despierta, y lo suficientemente bien para hacer con Sirius un juramento inquebrantable- respondió con un tono amargo, la enfermera estaba ocupada así que tomó algunas pociones esperando que alguna sirviera.- En serio no puedo con ella, es tan desagradable y últimamente la veo en todos lados, extraño los otros cursos cuando apenas sabía de su existencia

Y era cierto sentía que Blanchard estaba metida en todos sus asuntos, le molestaba su presencia, su actitud, era evidente que era Slytherin, pero al que no parecía molestarle tanto era Sirius.

-¿Un juramento inquebrantable?- preguntó colagusano sorprendido.

-Si por el momento nuestro pequeño problema peludo está a salvo.

-¿Por qué estoy a salvo?- preguntó Lunático con la voz débil apenas estaba despertando.

-Por nada.

-James creo recordar algunas cosas... recuerdo que alguien gritaba una chica... ¿Por qué recuerdo gritos? ¿Pasó algo?- preguntó alarmado apenas si podía incorporarse por lo débil que estaba.- Cornamenta ¿hice algo malo?

Remus lo miró fijamente pensó en mentir pero él nunca le mentía a sus mejores amigos, así que habló:

-Blanchard...

-¿Ataqué a Sadie Blanchard?- lo interrumpió preguntando alarmado.

-Ssshhh, no diría atacar, ella se lo buscó, estaba en le bosque prohibido a media noche ¿Qué esperaba que pasara? Pudo atacarla cualquier criatura mágica que habita en ese bosque.

-Pero la ataqué yo- comentó Remus poniéndose aún más pálido de lo que estaba.- No, no, no, sabía que esto iba a pasar, no debí... no debí... Sabía que nunca debí venir a Hogwarts y he sido tan irresponsable, merezco lo peor se lo diré a Dumbledore.

-Esta bien, bueno, no fue tan grave, tiene un rasguñito en el hombro y no la mordiste Remus, de seguro solo se quedará como una mala experiencia.- lo intentó tranquilizar James.

-¿Y si no? ¿Y si le pasé la maldición? ¿Y si la condene a esta vida por siempre?

-No es el fin del mundo, mira puede hacer una vida normal.

-No, no puede James, no me perdonaría si le quité eso. ¿Dónde está? Si la rasguñé debe estar herida- dijo buscándola con la mirada en las camillas de al lado.

-La dejamos en la casa de los gritos no se puede venir aquí porque que la atacaste Remus y te expulsarían.

-Me lo merezco.

-No, no te lo mereces, no la atacaste a propósito, estoy llevándome algunas cosas para limpiarle la herida, otra poción para restaurar la sangre, algo para el dolor...

-Debes llevarte algo contra la fiebre, busca una poción.

-¿Fiebre?

-Si, el cuerpo suele reaccionar de manera negativa contra esas heridas, por eso sería mejor que la llevaran aquí, la enfermera sabrá como tratarla.

-No, lo haremos nosotros.

Agradeció que ese día era sábado, poque si fuera clases sería más fácil de notar su ausencia.

...

-James se está tardando- murmuró Sadie con la voz entrecortada.

-No esta tan cerca, estamos en la casa de los gritos.- murmuró aunque él también pensaba lo mismo, la rubia estaba cubierta de una capa de sudor y no dejaba de soltar quejidos, tenían que limpiarle esa herida en cuanto antes.

Malas Decisiones  (Sirius Black) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora