– Creo que ahora me toca leer a mí. – dijo James, luego de que Elijah terminar de leer.
– Claro. – dijo Elijah – Todo tuyo. – habla entregándole el libro.
– “Las clases de vuelo” – leyó James al obtener el libro. – Creo que me gustará el capítulo. – habló con una sonrisa.
Nos dirigíamos a casa de Hagrid, Harry aun iba quejándose de Snape y Ron y yo tratábamos de decirles que lo dejara pasar.
– Pero el niño es cabezota y no nos hizo caso. – dice Ron
Tocamos la puerta de Hagrid y segundos después oímos su voz.
– Atrás Fang, atrás. – nos abrió la puerta. – venga, entrad.
La estancia era pequeña, pero agradable, del techo colgaban jamones y una cazuela estaba al fuego.
– Estáis en vuestra casa. – y soltó al perro, el cual fue directo a mí y comenzó a lamerme las orejas y yo solo sonreía.
– Este es Ron. – dijo Harry, mientras Hagrid servía agua caliente y tomaba pastel.
– ¿Otro Weasley verdad? – dijo mirando sus pecas. – me he pasado la mitad de mi vida ahuyentando a tus hermanos gemelos del bosque.
– Es demasiado fácil reconocer a un Weasley. – dice Hermione.
El pastel nos rompió los dientes, bueno al menos a Harry y Ron, pero ellos fingieron que les gustó, yo por mi parte ya iba por mi tercera rebanada y ambos chicos me miraban boquiabiertos, mientras tanto Fang estaba recostado con la cabeza en mis pies.
– Lo sentimos, Hagrid. – dijo Harry – Pero es que el pastel estaba muy duro.
– Descuiden, muchachos. – le dice Hagrid restándole importancia.
– Cara es diferente, es un pozo sin fondo. – habló Ron – Cuando se trata de comida, no importa lo duro que esté.
Todos estábamos asombrados por la impresión que tenía de la gata de Filch y de cómo le decía a ese viejo bobo, y Harry también le contó lo que pasó en la clase con Snape.
– Pero realmente parece que nos odie. – dijo él.
– No Harry, te odiará a ti, porque a Cara no la trató así. – dijo Ron.
– Tonterías. – dijo Hagrid – porque iba a hacerlo?
– Yo creo que es solo que su carácter es así, no deberíamos opinar respecto a él. – dije tratando de evitar que al Hagrid decir eso miró hacia otro lado, pero Harry se dio cuenta.
– Lamentamos de antemano siempre estar inculpándolo a usted, profesor. – le dice Hermione a Severus.
– Descuida. – le dice – Seguro tuvieron sus razones para sospechar de mí.
– Y como está tu hermano Charlie? – le preguntó Hagrid a Ron – me gustaba mucho, era muy bueno con los animales.– En serio? – pregunté – me gustaría conocerlo.
Harry iba a decir algo sobre lo de conocer a ese Charlie debido a su hermana, pero su atención fue llamada por un recorte de el periódico EL Profeta.
– Eres un celoso, Harry. – le dice Ron.
– Es mi hermana pequeña. – le contestó – Debo de alejarla de las moscas sin importar que.
– Estoy de acuerdo con el niño. – dijo Gallert.
Harry vio que era sobre un robo en Gringotts el mismo día de su cumpleaños y el de su hermana.
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Leyendo: La Heredera de Merlín.
FanfictionEra 1975 y apenas empezaba el quinto año de merodeadores.