Nadenka.-
Abrí mis ojos siendo enceguecida con la luz de la habitación.
Me tomó unos segundos acostumbrarme e identificar el rostro que estaba a mi lado.
Aunque solo habían dos opciones.
- ¿Nadenka? - preguntó el chico al sentir el movimiento en la cama.
Se había quedado dormido en un asiento utilizando el extremo contrario de la cama para apoyar su cuerpo.
- ¿Qué sucedió? - dije con dificultad sintiendo el picor en mi garganta por no beber agua.
Él se dió cuenta de esto y me entregó rápidamente una botella de agua que reposaba a su lado.
Bebí de esta mientras pequeños fragmentos del suceso llegaban a mi memoria.
Que tarde tranquila había tenido.
- Luego de despertarte de tu desmayo tuviste una pequeña crisis y caiste dormida - contó algo que no recordaba.
Miré por todos lados localizando mi celular y prendiendo el aparato, habían pasado más de tres horas desde el accidente.
¿Estaba un poco aliviada? Sí, no hubiera deseado estar en esas condiciones durante tanto tiempo.
El australiano preocupado tomó mi mano aunque yo incómoda la retiré lentamente mirando hacia otro lado.
Jamás había sido una persona especialmente afectiva físicamente aunque tampoco rechazaba muestras de afecto.
Ahora existía algo que me incomodaba y no entendía porqué.
- Es la segunda vez que presencio algo así - compartió y lo miré curiosa - solo que antes no fue tan extremo.
Me quedé observando su rostro unos segundos en silencio.
- Cuando tenía unos días en Corea decidí ir a Hongdae y todo fue genial hasta que regrese a mi hotel, un hombre me persiguió por algunas calles - recordé mi experiencia - sin embargo encontré a un chico que me ayudó, gracias a él pude regresar.
El más alto abrió de a poco los ojos con una expresión sorprendida.
- Creo que nos conocimos antes de que te unieras al grupo - imite su expresión - una noche embarque a una chica en un taxi para que vaya a su hotel luego de espantar a un extraño que la perseguía.
El sonido de la puerta al abrirse hizo que viéramos a la persona que entraba a la habitación.
- ¿Nadenka? - el extranjero se sorprendió - no me avisaste que ya había despertado.
- Perdona - sonrió inocente y el otro negó lentamente bromeando.
- La comida llegó - avisó antes de salir.
Me estiré en la cama saliendo con cuidado de esta, no estaba enferma pero existía la posibilidad de que el músculo me falle al estar tanto tiempo en reposo.
El chico me siguió con la mirada levantadose.
Talvez tendría que preguntarle por qué lo había encontrado a lado mio acostado en una posición tan incómoda.
- Gracias por todo Felix - sonreí tratando de demostrar mi sinceridad.
El nombrado quedó en blanco unos segundos hasta que comenzó a asentir devolviendo la sonrisa.
- No hay nada que agradecer.
Nos miramos unos segundos más hasta que rompí el contacto saliendo de la habitación por completo.
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Home | Stray Kids
FanfictionA veces encontramos nuestro hogar donde menos lo imaginamos ⚠ Leves referencias a Woojin ⚠ Actualizaciones lentas