Capítulo 11: Ola de rocas

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Ahora con un caballo que facilitaba el viaje, el trayecto en el desierto no fue tan fatídico como antes; ahora era tranquilo y bonito, se podía disfrutar del viaje y de lo que el desierto podía ofrecerte. Eran dunas y dunas hasta el horizonte, arena calmada y un cielo despejado completamente teniendo como único espectador al sol, siempre haciéndose notar.

La noche fue interesante, el frio era fuerte pero resistible con la ayuda de una fogata y del calor de algunas mantas que Adelaida había suministrado. El sonido de un ligero silbido era perceptible fácilmente; la arena con ayuda del viento nocturno producía un cantico curioso; era como el canto de la noche. Ambos tiempos del día eran interesantes.

Luego de varios kilómetros, Billy y Daslin llegaron la cordillera, podían observar las montañas color café que se elevaban al cielo, completamente sin una pizca de otro color que no fuese el anterior mencionado.

—Bueno...—suspira—llegamos...—dijo Billy

—¿Crees que hayan Brackteils, Hiergones, Yutos o Elemonts?, talvez un Armagolin

—No digas eso...

—Ups...

—Desde que salimos de Moonrock vengo preparándome mentalmente para lo que venga a continuación, sea lo que sea que se encuentre ahí dentro

—¿Qué hay sobre lo físico?

—¿Mis músculos?, están bien, el hecho de haber seguido montando un caballo fue muy bueno para mi cuerpo

—Qué bueno—dijo Daslin sonriendo

—Bueno..., ya estoy aburrido de solo ver amarillo, café y anaranjado, ¡quiero ver verde!—avanza con el caballo—sigamos

Inmediatamente al momento de entrar, el ambiente se volvió extremadamente silencioso, todo sonido murió aparentemente. El único sonido casi perceptible era la respiración de Billy y los pasos del caballo al igual que su misma respiración.

Billy era rodeado de impotentes paredes de roca las cuales en ciertos puntos creaban claustrofobia; por suerte él no padecía de este mal, pero aun así no le gustaba en lo más mínimo.

—Este lugar está demasiado tranquilo...

—Demasiado...—dijo Daslin

—Lo malo es que no sé si eso es bueno o malo...

—Procura estar atento a todo, yo igual vigilo desde mi botella

—Ya sé que no sientes absolutamente nada, pero en pequeñas situación es bueno

—¿A qué te refieres?

—Tu botella es de vidrio, si pudieses sentir algo, el calor por ejemplo, te estarías carbonizando ahí dentro ya que el calor y el sol golpean todos los lados de ella

—Una ventaja...

—Exacto, aun en lo trágico hay cosas buenas..., no todo es malo; solo es cuestión de verlas, pensar en ellas

En la distancia, sobre una roca, apareció Sabasthus observando a Billy como lentamente cabalgaba sin tener ni una tan sola idea de que estaba siendo observado.

—Hora del show—dijo

Desapareció luego de chasquear sus dedos.

Mientras Billy cabalgaba tranquilamente, inadvertidamente algunas rocas alrededor suyo empezaron a moverse hacia él; algunas grandes y otras pequeñas. Él no se daba cuenta de este detalle ya que ocurría detrás suyo. Daslin, al momento de observar a su alrededor, observó el extrañó fenómeno; algunas rocas se movían hacia ellos como tratando de tocarlos.

El viaje de la grandezaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora