I (dont) like boys ❣ TaeGi

Bibimbap y jajangmyeon

Taehyung tarareaba mientras limpiaba divertido el pequeño cuerpo del mayor, que simplemente se dejaba hacer, a estas alturas sabía que tenía cero sentido intentar negarse, sobre todo porque el culo le escocia como la mierda por la previa ronda de sexo en la ducha que acababan de tener.

Las manos del menor subieron a su cabello, lavándolo como si de un niño se tratase, sonriendo en grande, realmente se lo pasaba bien.

Yoongi lo observaba atento, nunca se había parado a fijarse en un hombre, pero tenía que reconocer que Taehyung era jodidamente hermoso. Tampoco se había fijado en los bonitos lunares de su rostro, en especial el del labio, era algo singular.

Sonríe de forma inconsciente, se siente bien entre sus brazos. No sabe qué es lo que le impulsa a hacerlo, pero poniéndose levemente de puntillas junta con suavidad sus labios, que lo reciben gustoso, Taehyung aprieta los cuerpos, entregándose a ese beso bajo el agua.

Las manos del mayor acarician su espalda, metiendo poco después la lengua, esa boca experta es jodidamente adictiva.

Restriegan entrepiernas, empalmándose una vez más, perdiéndose velozmente en el lujurioso y peligroso deseo que les oprime. Taehyung le alza para que se enrolle en su cintura y se apoya en la pared con él, enterrándose exitoso dentro de la más que abierta entrada que tiene.

Las estocadas son fuertes y rápidas, los gemidos altos y sonoros, la temperatura del agua parece que les quema la piel, pero sólo quieren fundirse como uno sólo.

— Yoongi me vas a deshidratar — gruñe en sus labios, arremetiendo con fuerza — pero follarte es tan delicioso.

— Hablas demasiado — gimotea, agarrado a su cuello fuertemente — fóllame más y habla menos.

Taehyung sonríe ladino y arremete con más fuerza, mordiendo con gula el labio inferior del mayor, que gime derrotado por el placer. Se sale levemente lo baja dándole la vuelta para volverse a enterrar, así es más fácil. Con una mano agarra su cadera y con la otra lo coge del cuello, echándole para atrás.

Yoongi estampa sus manos contra la pared, totalmente nublado.

Aprieta ambos agarres, aunque el del cuello lo hace menos, emprendiendo un salvaje vaivén de estocadas que dejan sin respiración a Yoongi, que está también totalmente excitado en su cuello.

Taehyung gruñe en alto cuando sus embestidas son tan fuertes que le hacen correrse con fuerza, pero sigue embistiendo hasta que se viene Yoongi, que nuevamente tiene que lavarse en condiciones.

El menor besa la espalda del peliazul, saliéndose y dándole la vuelta, para retomar su tarea de lavarle la cabeza, tan cómodo como si no acabasen de volver a follar.

— Después de esto, me voy — anuncia Yoongi, mientras Taehyung le enjuaga el pelo o— O no podré andar mañana.

— Eres tan chiquito — el peligris le besa de repente — si te quieres ir vete, aunque por mí te tendría toda la noche follando, principito.

— ¿Cómo puedes hablar tan descaradamente? — pregunta el mayor siendo dado la vuelta para que le limpie por detrás — por Dios.

— Tengo muchas posturas que probar — Taehyung se le acerca al oído, pegándose a su cuerpo — quiero ponerte a cuatro patas, follarte en la cocina, y también en el coche, también me encantaría comértela de nuevo.

Yoongi traga duro, no puede concentrarse debidamente porque los dedos del menor están supuestamente limpiando su entrada, cuando lo que realmente hacen es intentar sucumbirle ante la tentación.

— Otro día, realmente debo ir a c-casa — Yoongi gime ante la rapidez de sus dedos — Taetae, para...

— No me llames así o volveré a follarte — advierte, sacando obedientemente los dedos — me pones demasiado Min Yoongi.

Se separa no sin antes morderle la oreja. El mayor respira tranquilo, gran parte de él quiere quedarse eso lo sabemos hasta aquí en España, pero su pequeño gatito está solo en casa y tiene que comportarse como un adulto responsable que cuida de su mascota querida.

Ambos se salen de la ducha y se secan, aunque Taehyung no desiste en intentar convencerle un par de veces más en el proceso, igual que cuando se visten o cuando están en la puerta, pero al final, lo único que consigue es que le lleve a casa.

Yoongi entra por su apartamento, entre irritado y divertido, porque Taehyung ha intentado comérsela, otra vez, en el coche.

Ve a su minino en el salón y lo coge en brazos, repartiendo besitos cariñosos y él sólo se restriega contra la mejilla de su dueño.

Escucha su móvil sonar y lo desbloquea, rodando los ojos al ver el mensaje de Taehyung.

Kim V:

Yoonie, ábreme la puerta de tu casa, cómo es obvio no me he ido.

Min Suga:

¿Es en serio?

Kim V:

Abre y lo compruebas.

Yoongi extrañado y a la vez, esperanzado, abre la puerta, encontrándose efectivamente al menor allí, sonriéndole divertido.

— ¿Perdón? — pregunta con el minino en brazos y una ceja arqueada — ¿Qué haces aquí? A tu casa, Taetae.

El mencionado sonríe ladino, porque una de dos o se le ha escapado, o tiene ganas de seguir la fiesta.

— Cenemos juntos, Yoonie — propone con voz melodiosa, entrando sin invitación — además, quiero jugar con este bebé – Y señala al gatito.

— Eres un puto caso, Kim — el mayor suspira y cierra la puerta — ¿Quieres que pidamos algo?

— Pidamos gimbap y jajangmyeon — sonríe, arrebatándole al minino — hola bebé, yo soy Taehyung, pero tú puedes decirme Taetae, no eres el único gatito adorable que lo hace.

Yoongi niega y sonríe, yendo directo a por su móvil para coger el móvil y pedir por la aplicación mientras el peligris y el gatito juegan entretenidos en el suelo.

Por unos momentos, no parece el mismo gilipollas salvaje de siempre; piensa cuando le ve jugar divertido con su gato, sus mejillas están decoradas de un bonito rosa y su sonrisa cuadrada es jodidamente grande en ese momento.

Es realmente lindo; piensa el mayor, intentando ignorar ese sentimiento de calidez innecesario de su interior.