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୧narrador omnisciente୨
Todos ya estaban sentados, algún que otro feliz, otro no tanto y algunos sin interés.
Jshlatt esperaba con ansias a su amado, el cual ya se hallaba caminando a través vez del pasillo con una gran alfombra roja, con un vestido largo típico de las bodas, y cuando ya estuvieron juntos un corto pero cariñoso beso los unió.
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Enredaba sus brazos al rededor del cuello del castaño, mientras este lo tomaba de la cintura entre sus manos, siendo estos nuevamente unidos por un apasionado beso, el cual iba bajando conforme pasaba los segundos desde la barbilla hasta el cuello y hombro del azabache, este solamente generaba jadeos y quejidos ante tal placer, intentando mover su parte baja frotando su miembro con el del mayor. Fue recostado en la cama, y puesto en cuatro en una manera casi brusca pero dulce a la vez, sus manos fueron amarradas y su ropa fue quitada, a través del rabillo del ojo podía ver como la ropa de ambos yacía tirada en algún lugar de la habitación, podía sentir como la punta del pene del mayor se frotaba en su entrada sin llegar a entrar, mientras saliva empezaba a salir de la comisura de sus labios.
Podía sentir como su interior empezaba a ser de manera lenta llenado por el miembro viril del hombre, mientras su rostro estaba siendo inundado en una de las almohadas gracias a la mano del castaño ahogando así gemidos y jadeos que salían de el mientras que su interior era expandido por su pene, empezando a hacer un vaivén suave y lento siendo cambiado rápidamente por embestidas igual de lentas pero fuertes, donde los gemidos podían oírse aún estando inundado por la almohadas, sintiendo como sus hombros, cuello y espaldas eran marcados con chupetones y mordidas dejando marcas notorias en su lechosa piel, siendo ahora embestido de manera rápida y fuerte, sintiendo como su punto era golpeado de manera constante y fuerte, siendo al fin llenado por aquel líquido transparente mientras marchaba las sabanas por su mismos fluidos.
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