Enamorada Otra Vez

capitulo 17

Gerald odiaba la forma en la que se burlarón sus nuevos amigos de él. Ademas del hecho de que Phibi simplemente paso de él y eso odiaba ya que era él quien debia de darse de desear y no una chica inutil como Phibi.

--¿Qué quieres?--Amanda no le agradaba aquel chico pobretón, odiaba el simple hecho de que ese chico la hubiera detenido.

--Se que eres la más popular--Gerald sonreía complacientemente--Me encantaría que me ayudaras.

-¿Ayudarte a tí?--Amanda se río, aquel chico tal vez quería ser más popular o algo--¡Estas soñando!--Amanda estaba dispuesta a salir del salón pero Gerald se abalanzo contra ella y la empujo a la pared, sujetandola del cuello con firmeza.

--Te lo pedi bien--Gerald estaba demasiado molesto, la furia iluminaban sus ojos y apretaba con violencia a la chica quien se asusto e intentaba librarse-- Odio cuando las pendejas como tú, me menosprecían--Gerald sabía que apretaba con fuerza a la chica quien estaba poniendose roja del rostro por la falta de aire.--Solo debes de molestar un poco a Phibi, no llegar al extremo como con Laila--Gerald solto a la chica quien cayo al suelo y desesperada comenzo a buscar el preciado oxigeno.

--¡Estas loco!--Amanda escupio las palabras, sentía enojo pero al mismo tiempo miedo.--Mis padres te van...--Gerald la levanto de la cabellera y la miro a los ojos.

--Si no haces lo que te digo, te va a ir peor--Gerald lanzo al suelo a una temblorosa Amanda, el poco valor que había obtenido la chica la abandono. --La proxima vez no sere tan agradable--Gerald sonrio antes de marcharse.

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--Asi que soy Popular--Helga no lo podía creer, ser la chica nueva que golpeo a una chica popular la convirtio en la nueva popular.

--No es así de facil--Kael no le agradaba que Hunter solo se la pasara viendo a la chica nueva. Había intentado ganarse la atención del chico como pareja pero solo había altibajos.--Ademas no cualquiera puede ser popular.

--Helga terminastes siendo popular--Hunter sonrío ya que la idea de que la rubia fuera popular para que asi su padre no le prestara tanta atención y no la pudiera tocar.

--¿En serio? No me importa--la incredulidad en la voz de Helga cambio a un tono frío como si aquello no le importara pero si le importaba aquello.

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Arnold paseo por el parque, no tenía los animos para ir a la escuela. Toda su vida había intentado ver el lado positivo de las cosas pero nada le salía bien.

--Por que te fuistes--Arnold se sento en un arbol, saco la ultima carta que Helga le había enviado de su bolsillo y aun podía oler a la chica en ella--Eras la unica que siempre me hablabas con la verdad, nunca aparentastes algo que no y aun que me hablabas fríamente, tienes un corazón de oro--Arnold solto un suspiro, su vida no tenía sentido.

--Tantas veces suspiro por tí y te dedicaba palabras romanticas--Brainy se había enamorado de Helga, a él no le importaba si un día era la chica mas ruda o al siguiente la chica mas cursi.

--¿Qué?--Arnold le había asustado la precencia del otro chico, no se había dado cuenta de cuando había llegado.--¿Cuando llegastes Brainy?

--Eh estado sentado aquí desde que llegastes--Brainy estaba algo molesto ya que aquel rubio había dejado ir a una chica inigualable.

--Yo...no te importa--Arnold no iba a seguir siendo el mismo chico amable y servicial, eso jamas le había funcionado pero en cambio le había provocado más problemas.

--No eres el unico que la extraña--Brainy se levanto y se fue caminando dejando a un Arnold confundido y celoso.

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Bob golpeo a Miriam, no solo la mala decisión de su hija de tomar a Helga como su hija lo afectaba, tambien estaba el hecho de que si regresaba a su antigüo hogar, las personas se darían cuenta.

--Lo siento--Miriam estaba perdida en alcohol, ella lo que menos deseaba era que su marido estuviera enfadado.

--Si tan solo me hubieras dejado abandonar a esa mocosa--Bob gruño molesto. Desde el principio había querido abandonar a Helga en un orfanato o en un basurero pero Miriam se lo impidio y dio la idea de cuidarla como suya.

--Lo siento--Miriam repetía aquellas palabras como un disco rayado, aun recordaba la vez que dio a luz a Olga y Bob la golpeo despues de salir del hospital por no darle un varón--Lo siento.

--¡Es tu culpa!--Bob pateo el estomago de su borracha esposa, le ponía de mal humor incluso que se disculpara.--Si tan solo me hubieras dado un chico en lugar de una niña. Nada de esto hubiera pasado.

Miriam se hizo bolita en el suelo, lloraba de forma silenciosamente esperando que Bob se marchara.

--¡Eres una inutil! ¡Una floja que solo se la pasa en el sillón o en la cama!--Bob miro con desden a su esposa para gruñir molesto y salir con un sonoro portazo.

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Phibi se miro una vez más en el baño de la escuela, realmente se sorprendía lo bien que se veía.

--¿A quien tenemos aqui?--Amanda había buscado a la chica que el maldito Gerald le había dicho, tal vez podría vengarse un poco.

Phibi rodo los ojos, ya que conocía cuando alguien intentaba buscar problemas. Sabía que aquella chica había enviado a Laila al hospital por sus crueles bromas.

--Compermiso--Phibi fue detenida, no solo estaba Amanda, si no que tambien otras tres chicas más.

--Quien te dio permiso de irte--Amanda la empujo para atras con una gran sonrisa burlona pintada en sus labios, las otras chicas se rierón.

--No necesito tu permiso--Phibi fruncio el entrecejo--Si quieren problemas, no crean que soy como las demas--las risas de las otras chicas eran carcajadas burlonas--Yo voy a meterlas a la carcel y no me importa si eso trae consecuencias a sus familias.