[ XL ] Amargo Leteo

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Toqué la puerta de la enfermería sintiendo una terrible angustia en el pecho.

—¡Eliksir pasa, siéntate ahí!—Mathyz me recibió y me guió hasta una de las camillas desocupadas.

—Gracias—Dije esbozando una sonrisa desganada. 

No había podido pegar ojo anoche después de leer acerca de la poción de Mnemosine. 

Miiko me mintió. 

La supuesta poción que ocultaría mi presencia... en realidad, es una poción relacionada con las memoria.

¡Es por eso que me pareció tan raro que el agua de Leteo fuera uno de los ingredientes!

Fuí una tonta por no investigar al respecto desde un principio. De no haber sido por ese libro, no me hubiera enterado de sus verdaderas intenciones. 

Cryllis tuvo razón al advertirme que no confiara en nadie de la Guardia.

¿Habrá sido él quién dejó el libro en mi habitación? Porque estoy segura de que no es coincidencia que estuviera marcada la página que hablaba acerca de Mnemosine. 

—Hey Eliksir, veamos cómo van tus heridas...—Oluhua cerró la cortina del cubículo y procedí a quitarme la blusa para que inspeccionara la evolución de los hematomas. 

—Oluhua, ¿Sabes cómo está Eweleïn? No la he visto en la enfermería desde su regreso—Comenté mientras la selkie empezaba a observar las heridas de tonalidad verdosa en mi piel.

—Tomó un pequeño descanso, aunque conociéndola... la obligaron porque ella prácticamente vive en la enfermería—Respondió Oluhua negando levemente con la cabeza.—Los hematomas ya casi han desaparecido, calculo que en dos días más volverás a tener tu piel impecable.

Por fin algo bueno, aunque esto no hace que me sienta más animada.

—Que alivio, gracias Oluhua—Después de ponerme la blusa, me puse de pie para salir del cubículo junto a la selkie.

—Eliksir, ¿tienes alguna pregunta?—Cuestionó Mathyz, quiénes nos esperaba en la entrada de la enfermería con un portapapeles en mano.

—Yo-... ¿Puedo consultar algo con ustedes?—Esta es la oportunidad de confirmar mis sospechas, pues sigo sin creerme que la Guardia haya planeado traicionarme de forma tan sucia. 

—No Eliksir, no puedes salir conmigo—Declaró el tritón poniendo una expresión solemne.—Ya sé que soy muy guapo, pero soy un hombre que le gusta su libertad-... 

Mathyz—Lo interrumpí con irritación. 

—¡Solo ignóralo, es lo que yo hago!—Me dijo Oluhua rodando los ojos.—¿Qué es lo que quieres consultar con nosotros? 

—Ezarel me está dando clases de alquimia y hay algo que no me quedó muy claro acerca de una poción en específico—Saqué el papel con los ingredientes que Ezarel me había dado y se los mostré a ambos.—Estos son los ingredientes.

Oluhua y Mathyz leyeron el papel por unos segundos hasta que la selkie reaccionó:—¡Ah, es la poción de mimosa!

—Es Mnemosine, tonta—Corrigió Mathyz.

Remordimientos tardíos; EldaryaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora