Me había despertado extra temprano para empezar las preparaciones del regalo de Leiftan.
Después de bastante contemplación, me había decidido por prepararle un pastel.
Sabía que Leiftan era de paladar dulce y que apreciaría más algo que yo misma había hecho especialmente para él.
Hornear, en mi opinión, era un poco más complicado que cocinar. Además de que no tenía a mi disposición los utensilios a los que estaba acostumbrada.
Necesitaba ayuda.
¡Y quién mejor que Twylda para echarme la mano!
Recuerdo que después de ayudar a encontrar a Mery, la señora Twylda me preparó unas galletas de rechupete y en otra ocasión, me había hablado de la gran pasión que tenía por preparar postres.
Estaba muy agradecida, pues la brownie accedió a ayudarme sin dudarlo. Fue muy grato compartir la cocina con ella. Incluso me hizo recordar mi infancia, cuando acompañaba a mi madre en sus tardes de hornear.
Es más, me había decidido a recrear una de sus recetas: pastel de crema de caramelo. Ya lo había preparado antes, pero sin lograr el mismo sabor, lo cual era un poco deprimente.
Esperaba que esta vez pudiera lograrlo.
Después de todo, cuando le preguntaba a mi madre por su ingrediente secreto, ella siempre respondía: "El truco está en prepararlo con la persona que amas en mente".
En ese entonces no lo entendía, pero ahora sé a que se refiere.
Una vez que terminé de decorar el pastel con los colores favoritos del lorialet, admiré el producto final fijándome en que todo se viera perfecto.
—¿Crees que a Leiftan le guste?—Le pregunté a Twylda con cierto nerviosismo.
—Estoy segura que le gustará cualquier cosa que le des—Respondió Twylda en tono divertido.—Uno solo necesita ver la forma en que te trata para darse cuenta de que está completamente enamorado.
Sentí que me sonrojaba al pensar cómo nos veríamos ante los ojos de otros.
No nos mostramos tanto afecto en público, aún así, ¿es obvio que estamos enamorados?
Me da un poco de vergüenza.
—Soy realmente afortunada de que alguien como Leiftan se haya fijado en mí—Solté en un susurro.
—Ambos son personas hermosas por dentro y fuera, era cuestión de tiempo para que se encontraran el uno al otro—Comentó Twylda apoyando su mano sobre mi hombro esbozando una sonrisa maternal.
Después de guardar el pastel en el refrigerador, me cambié a mi ropa de entrenamiento.
Había quedado de practicar con Jamón en los jardines, ya que él tenía algo de tiempo libre y quería ver cuánto había avanzando desde nuestra última sesión.
—¡Eliksir mejorar mucho!—Exclamó el ogro en alabanza.
—Gracias Jamón—Me limpié el sudor de la frente con el dorso de la mano mientras recuperaba el aliento.—Uff... estoy exhausta.
Entrenar con Jamón siempre consume toda mi energía.
—Ah, ¿terminaron el entrenamiento? ¡Me perdí de la acción!—Cameria apareció por la fuente de música cargando con un pequeño morral.
—¡Cameria!—Fuí a recibirla, pues se había ido de misión desde hace unos días.—¿Cómo te fue en la misión?
ESTÁS LEYENDO
Remordimientos tardíos; Eldarya
Fanfic"Por algún motivo llegaste a Eldarya, tu alma gemela pudo siempre estar aquí... Esperando por ti." Créditos correspondientes a los creadores de Eldarya. F A I R Y L