Allianser

2. Cuando nadie está observando

Buenas noches mi gente (⁠◍⁠•⁠ᴗ⁠•⁠◍⁠)

¿Cómo están? 

gracias a la insistencia de nuestra querida Madu, hoy hay capitulo ✨✨✨

espero lo disfruten y encuentren las referencias ejejej hay de viejas historias 

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A pesar de todo, la recepción fue increíblemente agradable para Colombia, el lugar escogido fue un hotel de la ciudad de Oslo, era pequeño, apenas un edifico de veinte pisos y un hermoso jardín rodeado de árboles y flores, el lugar perfecto para montar una pista de baile y una carpa decorada con luces y música. Para todos fue una sorpresa el lugar, disfrutando de lo que los novios habían preparado para quienes los acompañaron en esa celebración tan especial.

Otra sorpresa para la novia, había sido lo atento que Noruega era con él, no era ese tipo de atención empalagosa y fingida que podía desesperar a Colombia, era una buena atención, Noruega solo se acercó a él para partir el pastel, algunas fotos y el baile de inicio de la fiesta, de resto, el vikingo le había dado el espacio suficiente para que disfrutara de su noche.

Colombia había disfrutado la comida, el poder reunirse con sus hermanos y hablar de trivialidades, bailar con España y reír con Ucrania mientras este le contaba alguna historia. La verdad parecía una noche cualquiera, una dulce calma se instalaba en su interior, la calma que daba fingir que no sabía que pasaría al final de la noche, poniéndose más ansiosos a media que el tiempo transcurría.

Con disimulo, Colombia observaba a su esposo, Noruega se veía tan tranquilo hablando con Francia y UK, como si realmente no supiera lo que seguía, realmente lo odiaba por eso, en todo el proceso de planear la boda, Noruega se veía tranquilo, a veces aburrido incluso, como si el tampoco deseara casarse, como si solo fuera un juego y eso le molestaba, porque él se estaba muriendo por dentro y el idiota ni siquiera podría mostrarse empático o preocupado por él.

- ¿Nervioso hermanito? – Pero una voz saco al colombiano de sus pensamientos, colocando lejos el vaso con hielo que tenía en la mano, masticar aquellos cubitos lo ayudaba a relajarse. Desorientado, Colombia vio como Finlandia se sentaba con él, quitándole el vaso y tapando su visión.

-No me digas así Finlandia- Pidió con fastidio, increíblemente se llevaba mejor con los hermanos de su esposo que con el mismo- ¿Dónde dejaste a Rusia?

-Está bailando con Ucrania- Respondió divertido, no le molestaba que la gente se burlara por la poca capacidad del ruso de despegarse de su lado, la verdad, el finlandés también disfrutaba de toda esa atención- Pero dejando de lado mi perfecta alianza, bien a brindar contigo.

- ¿Conmigo? -Pregunto extrañado el rubio recibiendo la copa de líquido ámbar - ¿Qué es esto?

-Hidromiel, una bebida típica de tu nuevo territorio- Aclaro- Mis hermanos y yo lo empezamos producir desde que aceptaste el compromiso.

-Vaya...eso es muy lindo de su parte, pero no puedo aceptarlo.

-No vayas a empezar- Pido con fastidio el pelinegro- A pesar de todo ahora ustedes están juntos y debemos brindar por eso.

Aunque no quería, Colombia no tuvo de otra, chocando su copa con la ajena y bebiendo el líquido con sabor a miel y madera de un trago, aunque estaba frio, Colombia pudo sentir como su cuerpo se calentaba a medida que se desplazaba por su garganta, matando las mariposas que revoloteaban en su ansioso estómago. Sin poder evitarlo sonrió ante la sensación, bebiendo otro poco junto a Finlandia.