"Dizque hetero"

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Rojo por aquí, rojo por allá, agh! Estoy cansada. Según yo este iba a ser EL día, hasta que a mi mejor amiga se le ocurrió venir a una fiesta universitaria donde solo habían jóvenes borrachos solteros, y unos que otros que llegaron así y tal vez se vayan con un buen polvo arriba.
No se ni como llegamos, aun estamos en la secundaria, ya casi terminando, pero no se fíen de mi mejor amiga, esta es que le faltan tornillos.

-Oye tuuu- me gritó al oído

-dime estupida- la mire mal.

-Estas enojada por que estamos aqui- oh que evidente- pero si estuvieramos con...- y le puse la mano en la boca- la innombrable- dijo como pudo con mi mano en su boca.

-Callate, no te soporto

-Oye tuuuu- la ignore- OYE TUUU-grito más fuerte en mi oído y me obligue a tirarle una mirada de muerte.

-ves a ese chico allí?- mire hacía esa dirección y asentí- ves a la chica tras de él?- entrecerré los ojos, soy ciega.

-Si

-Vamos?

-Si

-Que más?

-Solo vamos maldita sea

-Y si son novios?- pregunto

-Pero coño tía, haz sido tu la de la idea de ir.

-Ah, verdad- se río y casi se atraganta con su bebida.

-Ya estas muy borracha, mejor nos vamos.

-No sin el instagram de ese guuuuuapo- dijo y me hizo reír.

-Vamos pues- y derrepente vi como toda la borrachera salio de su cuerpo.

Camino recta, se acomodo el vestido, y fuimos hasta allí.

Un chico alto, moreno, con una camisa desabotonada en los botones superiores, una cadenita en el cuello, un olor enbobante y ojos claros, junto con...
¿¡CON?!..

¿¡ELLA?!

-Eh, tú- me sacudió mi amiga- esa no es la tía hetero que te gustaba el año pasado, antes de que saliera de la secundaria?

-Esa mismita...

-Y que si con dos copas arriba se le cae lo hetero- subió y bajo sus cejas.

Camine hacía ellos, con mi borracha al brazo.

-Buenas noches lindos- dijo la chueca.

-Buenas noches damas- se volteo el joven.

Ptm si que es lindo.

-Andas ocupado?- le pregunto mi amiga jugando con el popete de su baso.

-Para ti no.

Y cuando Celía vio que era yo..

-Joder..

-Un gusto verte de nuevo.

-I..igual- dijo sorprendida.

Me acerque a su oreja, poniendo un par de cabellos tras su oreja.

-¿Por qué no volviste a buscarme luego de dejarte las piernas temblando en aquel cumpleaños tuyo?- susurre en su oído.

-No tengo justificación, pero me puedo disculpar- dijo repitiendo mi acto.

-Si, como?

Me miró con los ojos llenos de lujuria, me acerco a ella con sus manos cerca de mis glúteos y dijo:

-Devolviendote el favor.

Pero interrumpieron el momento.

-Oye amiguisss- Maldita sea- me voy a casa, tal vez.. Hector me va a llevar- río- Perdón por dejarte tirada mi amor.

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