Capítulo 20

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Pov Namjoon

Abrí mis ojos encontrándome solo en la cama, escuchaba el agua correr y mi cuerpo se tensó al imaginarla en la ducha. Desnuda, tocando su cuerpo, lavándolo.

La escuché cerrarla poco después y me senté en la cama para esperar. Salió envuelta en una toalla, las gotas de agua aun bañaban su piel y deseé recorrerla entera.

-Te ves mas descansada

-Recuerdo- me miraba fijo, sus ojos estaban como cuando era humana.

-¿Que cosa recuerdas?

-Lo que conversábamos antes de que pasara esto- se señaló y se acercó a mi con rapidez, sus poderes parecían comenzar a aparecer y esta no lograba mantenerlos en la normalidad. -Dijo que me amaba

-Lo hago- fui sincero

-¿Porque me convirtió?- negué

-Sentí tu nacimiento. Sentía cada cosa que tú hacías. Tus tristezas y deseos.- tomó asiento en la cama justo a mi lado y continuó mirándome.

-Quiero volver a sentirlo.

-¿Que cosa?

-La sensación de beber, su cuerpo unido al mío.

-Puedes morderme

-Quiero que me toque

-Lluvia, no se si sea correcto

-Dice amarme

-Lo hago, por lo mismo te respeto.- la toalla abandonó su cuerpo, se puso de pie frente a mi y se acercó hasta sentarse sobre mi regazo.

-Siento calor al tenerlo cerca, deseo que me toque, que me bese.

-Es por la unión, hasta no concretarla será así.

-Concrétela, se lo que significa. Yo quiero.

-No puedes estar segura de eso, podrías arrepentirte luego.

-No lo haré- picó mis labios y luego los mordió hasta hacerme sangrar. Era deliciosa la sensación, quería mas, lo deseaba.

-Te haré sentir bien hasta que tu mente esté mas clara.- negó

-Iré a que alguien mas lo haga.

-Lluvia

-No le gusto, ¿porque me convirtió?

-Me gustas, mucho. No sabes lo difícil que es para mi tenerte así y no mirarte, no tocarte.

-Recuerdo el beso, sus toques cuando me emborraché. Hágalo otra vez. ¿No entiende que desde que lo vi por primera vez a través de esa pantalla muero por usted? ¿Que lo creí un imposible para mi y me conformaba con el hecho de admirarlo de lejos. Que su cuerpo me llamaba de igual manera que lo hace ahora y que me creí morir cuando dijo que alaba a alguien mas?

-Te amo a ti

-Demuéstrelo, demuestre que esto que siento no es solo mío.

Mi boca se acercó a la suya y esta devolvió el beso que le di, sabía que no tenía experiencia por lo que la besé lentamente hasta que fue ella quien pidió mas.

Me deshice de mi camiseta y volví a su boca para tomarla nuevamente, sus jadeos se me hacían aún mas eróticos y mi cuerpo tembló por el deseo.

La recosté sobre la cama conmigo encima y sus ojos volvieron a ser rojos al mirarme. Sus manos no se alejaban de mis hombros pero sus piernas parecían querer aferrarme tanto a ella como era posible.

Besé su cuello, mandíbula, labios, su cuello fue tomado nuevamente, sus pechos. Con cada beso, con cada caricia sentía una parte de mi unirse a ella.

Mi boca fue a su intimidad y la besé con delicadezas, paseé mi lengua por toda ella y sus piernas amenazaban con apretarme hasta fundirme en el lugar.

Sus piernas temblaban, sus manos trataban de apartarme a la vez que sus piernas me mantenían en el lugar y cuando la sentí esparcirse en mi boca mi pantalón amenazó con reventar.

Me erguí hasta alcanzar su rostro, sus piernas abiertas me dieron cobijo para posarme sobre ella y volver a besarla. Por mas que deseara alejarme para desnudarme por completo esta no me lo permitía, acabé adentrando mi mamo entre ambos y arrancar mi pantalón y bóxers para sacarlos.

Sus manos fueron a mi cara nuevamente y la atrapó a la vez que su interior me acogía con ganas. Me moví con lentitud con ella. Ambas pieles deseando ser una, ambos cuerpos al compás del deseo que nos teníamos, ambos corazones juntos.

-Señor...- sus ojos abarrotaban lágrimas, podía ver el deseo en ella, las ganas de obtener eso que se aproximaba.

-Hazlo mi amor, hazlo- la sentí apretar a mi alrededor con tantas ganas que al tratar de salir de ella me vi vertiéndome en su interior. -Te amo- piqué sus labios una vez mas antes de dejarme caer a su lado y atraparla para abrazarla sobre mi.

-No usó condón- reí

-No hay tal cosa como esa para los vampíros. ¿No quieres un bebé?

-¿Usted quiere?

-Todos los que nos sea posible- besé sus labios. -Aún así es imposible que quedes en cinta, no dentro de 500 años, hasta que obtengas la madurez vampírica.

-Pero...

-¿Que pasa?

-Jungkook, el... ¿como no es posible?

-Cuando el cuerpo de una bruja es mordido este cae en un sueño durante algunos días, es distinto para cada una. En ese tiempo aún continua siendo humana pues su cuerpo lo toma para hacer el cambió. Mientras su madre cambiaba el la tomó, por eso su cambio se realizó al momento de la concepción.

-Eso es...

-Turbio, lo se. Mi padre me contó que ella lo había hechizado de alguna manera, para que no la tocara, solo la convirtiera. Pero los hechizos en los vampíros.

-No funcionan- terminó por mi.

-¿Te sientes mejor?- asintió

-Lo hago- parecía dudar. Sus ojos me miraban fijos nuevamente y sus labios hinchados me llamaban a tomarlos.

Acabé sentándome y esta se sentó sobre mi regazo. -¿Que pasa?- sentía su cuerpo tenso. -Se que quieres otra vez, pídelo. No tiene que darte pena.- volví a besarla y esta se aferró mas a mi.

-¿Como lo sabe?

-Por esto- señalé mi erección cual era presionada por ambos estómagos, su boca tomó la mía y saboreó mientras levantaba levemente su cuerpo hasta posicionarla sobre mí de manera que mi punta la tocara. Se sentó en mi hombría y sostuve si cadera para hacerla mover. Cada roce, cada gemido, cada sensación me tenían embobado, borracho de ella.

-No sabes todo lo que te esperé






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DeliberadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora