✦ʚ8ɞ✦

2.7K 299 21
                                    

˚₊· ͟͟͞͞➳❥

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

˚₊· ͟͟͞͞➳❥

Estaba a nada de besar a Lalisa Manobal.

No, esperen.

Ella me intentó besar a mí. Y yo fui la tonta que iba a dejar que eso ocurieran, cuando estaba más que claro que una princesa jamás debe besar a otra prsona que no sea con quien se va a casar.

Me dejé llevar por el momento; porque Lisa ni siquiera me atraía de esa manera. Era una linda princesa, pero no más. Y sin dejar de mencionar que mi primo estaba interesado en ella, debo estar loca.

El simple hecho de pensar que yo podría besar o siquiera estar con alguien como Lisa, me provocaba escalofríos.

Debo estar con alguien de San Francisco, pero jamás con una princesa la cual sé que tiene muchas responsabilidades, eso provocaría en mí la locura. Y admiro quien sea capaz de poder sobrellevar esa vida.

Lisa es linda pero no mi tipo.

Sólo fue el momento, ella no me gustaba. Y es imposible que me guste en tan poco tiempo.

Y gracias a que casi nos besamos y la posición tan comprometedora en la que nos encontrábamos, mis amigas probablemente no dejaran de hacerme preguntas durante lo que queda del año, cosa que me da más miedo.

Las tenía privadas de mi vida no sólo intimida, sino también romántica. No me preocupaba en darle detalles de algo que por más amigas mías que fuesen, no les competía. Creo que eso me diferenciaba de muchas de ellas, a las cuales no les molestaba decir las cosas tal cual.

En cambio a mí si.

No me gustaba ir ventilando mi vida íntima, romántica o cosa por igual. Ya que eso era muy mío.

He tenido distintas relaciones, incluso, les comenté de algunas. Pero jamás me encontraron en un casi beso o algo por igual, no obstante, ahora lo habían hecho; cosa que le daba material para hablar. Y mucho más si es de la princesa Manobal. La cual es conocida por todas ellas.

Sacando a relucir que Sana una vez dijo que no le importaría servirle de adorno si eso conllevaba a estar junto a una perfecta princesa como Lisa.

La cual destcaba por tener esos lindos rasgos Tailandeses.

Ese cabello negro el cual brillaba con el hecho de un reflejo de luz. Y su hermosa sonrisa, la cual no le daba pena mostrar cuanta veces sea posibles. Y es que, es obvio, era hermosa.

De pies a cabeza Lisa destacaba por ser una dama, y su forma de vestir, ser u caminar, destacaba mucho en ella.

En todo momento alzaba su barbilla, dando a entender que el podía estaba dentro de ella. Pero eso no le arrebataba aquella dulce y tierna mirada que tanto la caracterizaba. La cual no perdió justo antes de besarme, y en todo momento respeto mi espacio, pidiéndome el permiso para proceder, cosa que nadie antes había hecho.

Una Princesa En Apuros. (Jenlisa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora